Él asintió levemente mientras bajaba la mirada, sus manos estaban colocadas a los costados de mi cintura y con sus pulgares me daba pequeñas caricias.
Mario: trabajaré duro para que no sea difícil para ti, entiendo que te hice mucho daño y quizás todavía te lo sigo haciendo por tenerte aquí.- no dejé que terminará de hablar así que decidí cambiar de tema, entendía que esto también estaba siendo difícil para él por muy raro que fuera.
Tn: no tenía idea de que sabías hablar inglés.- él asintió y regresó hasta su silla en dónde golpeó su muslo mientras me miraba, me baje del escritorio para luego sentarme en su pierna, quizás para algunas personas hacer eso era algo provocativo pero para mí no, creo que para él tampoco lo era ya que no hizo nada malicioso.
Mario: es bueno saber muchos lenguajes ¿sabes? Las puertas del mundo se abren para ti.- deslizó su silla hasta quedar más pegada al escritorio y comenzó a escribir cosas que por supuesto no entendía.- aunque esto no sean puertas.
Tn: he tenido una duda desde que estoy aquí ¿qué es lo que tú haces?- él dejó de escribir y me miró, se encogió de hombros confundido mientras se recargaba en el respaldo de la silla.- sí ¿cuál es tu trabajo?
Mario: bueno, tengo algunas propiedades así que las vendo.- lo miré incrédula y él solo río.- de acuerdo ya sé de que hablas, digamos que usando términos más tiernos para ti, le ayudo a las personas a tocar el cielo pero no a todas, solamente a las que de verdad se lo ganan.
Tn: no necesitó que uses esos términos conmigo ¿sabes? También sé de cosas como el narcotráfico.- él me miró fijamente, esos ojos burlones.
Mario: oh, ¿en serio? ¿Crees que soy un narcotraficante?- lo miré fastidiada y rodé los ojos, me incliné a su computadora para quitar la página en la que estaba escribiendo.
Tn: ¿tienes juegos?- él negó, lancé un suspiro mientras navegaba por su portátil pero en sí no tenía nada que no fuera negocios a excepción de una carpeta con tres puntos suspensivos, me causó un poco de intriga pero para mí mala suerte ésta tenía contraseña.- ¿qué tienes aquí?
Mario: eso es algo privado así que no puedes verlo.- cerró aquella página y besó mi mejilla.
ESTÁS LEYENDO
Me Perteneces
RomanceEres mía ahora, mientras camines sobre la tierra me perteneces. Nada podrá hacerte daño. ~Dank