Imaginas Multifandoms

104.-MISS PEREGRINE (MILLAND NULLINGS)

Este OS está basado en el primer libro de la serie, así que los personajes tienen edades diferentes y algunos están cambados con respecto a la película.
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Vanya estaba algo preocupada cuando Enoch abrió la puerta donde el Wight les había encerrado para secuestrar a Miss Peregrine y Miss Avocet. Millard estaba escondido cuando el hombre llegó y no había bajado allí con ellos, así que suponía que le había seguido. Sabía que no estaba allí porque era capaz de sentirle. Su peculiaridad eran unas enormes alas de suaves plumas blancas. Gracias a estas notaba el más mínimo movimiento del aire y así localizaba cualquier cosa que se moviera, incluso cuando era invisible.

Todos los niños peculiares menos Enoch, Bronwyn y Hugh salieron de la casa en busca del Wight y de las Ymbrynes.

Vanya le sintió antes de que hablara:

- Se ha escondido en el faro- Les llegó la voz de Millard. Fiona avisó de que iría a buscar a Emma y al resto mientras ellos vigilaban que el hombre no se fuera.

Cuando todos estuvieron reunidos de nuevo, empezaron a discutir cual era la mejor forma de llegar al faro sin que el Wight les pillara.

-Podría ir volando sobre el techo del faro y caer sobre él- Ofreció la chica alada.

- Ni hablar, podrían verte tanto el Wight como los bombarderos- Le recordó Millard.

- Pues entonces está decidido- Dijo Emma. -Iremos nadando, ¿Quien se viene?

Jacob y Bronwyn levantaron la mano.

-Necesitareis a alguien que el Wight no pueda ver- Se ofreció Millard. Vanya iba a hablar, pero Emma se adelantó.

- Cuatro son suficientes- La joven se sintió algo dolida porque no le dejaran actuar, pero Emma tenía una razón, y el resto de peculiares pensaban igual: si Vanya se mojaba las alas, estas se hincharían y no podría volar hasta que se secaran de nuevo, y podrían necesitarla antes de que eso pasara.

Ante esto, el resto les deseó suerte y los cuatro se pusieron en marcha. Desde el otro lado de los arbustos estaban bien escondidos, pero no veían muy bien lo que ocurría en el agua. Aún así vieron como los tres peculiares (y suponían que Millard también, aunque no le veían) nadaban introduciéndose en el mar y se detenían sobre algo grande oculto bajo el agua.

Se escucharon varios disparos que asustaron a la mayoría de los niños y los cuatro regresaron al agua. Pronto se escuchó un nuevo disparo y gracias a su peculiaridad, Vanya notó como la bala alcanzaba al chico invisible. Tuvo que taparse la boca para no delatar su localización con un chillido. Los otros tres corrieron hacia él para ponerle a salvo y desaparecieron bajo el agua.

Vanya se puso de pie, pero Enoch y Hugh volvieron a agacharla.

-¿En que pensabas?- Le preguntó el chico panal.

-En salvarles.

-¿Tú sola? ¿Y qué vas a hacer, revolotear al Wight como un moscardón?- Preguntó Enoch con sarcasmo.

-Exacto.- Respondió ella extendiendo sus alas justo cuando Bronwyn emergía de nuevo, esta vez con una puerta de metal como escudo. El Wight empezó a disparar contra los chicos que se acercaban por el agua, ajeno a la joven que volaba en su dirección. Pero cuando la vio, dirigió la mira de su pistola hacia ella.

En cuanto Emma se dio cuenta de que ya no disparaban en su dirección, levantó la mirada.

-¿Qué está haciendo? ¡Está loca!- Exclamó entre asustada y enfadada. Millard elevó la mirada con cansancio, pero al ver las grandes alas blancas esquivar balas sintió que despertaba de nuevo.