¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
—Competidores, en sus marcas, listos, ¡Fuera!
—Bien, también debemos ir —dijo Naruto.
Los cuatro nos sorpendimos al ver cómo Idate se desvía del camino. Comenzamos a seguirlo sin comprender que es lo que planea. El rubio lo alcanzó mientras nosotros los seguimos un poco más atrás.
—No se han dado cuenta del Genjutsu —dije mientras veo como siguen corriendo.
Idate corrió dejando atrás a Naruto, así que me puse al lado de mi amigo y saqué una cuerda.
—Amarrate y ve —asintió yendo detrás del idiota, quien salió del camino cayendo al vacío.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
—Bolas de lodo, ¿Eh? ¿Qué es esto, una pelea de infantes? —Naruto y yo nos pusimos frente a ese hombre de cabello verde.
—Lo siento, Naruto perdió sus armas —dije con una sonrisa.
—¡Naruto, Hana! —gritó Idate al vernos.
—Necesitarás más que una sombrilla para lo que te lanzaré. ¡Kage bunshin no jutsu! —un clon apareció y con su ayuda comenzaron a crear el Rasengan.
El enemigo sacó algo de su espalda y al verla supe lo que era. Mis ojos y mi boca se abrieron con sorpresa. Naruto fue a atacarlo con sus clones y con el Rasengan, pero no pudo hacer nada, lo arrojó al suelo a unos metros de mi. Abrió su sombrilla lanzando agujas senbon en dirección a Naruto.