𝐵𝑒𝑠𝑡 𝑂𝑓 𝑀𝑒 ➛ 𝑁𝑒𝑗𝑖 𝐻𝑦𝑢𝑔𝑎

𝙲𝚊𝚙𝚒́𝚝𝚞𝚕𝚘 𝚘𝚌𝚑𝚎𝚗𝚝𝚊 𝚢 𝚍𝚘𝚜

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— 𝐁𝐄𝐒𝐓 𝐎𝐅 𝐌𝐄 —

"𝑌𝑜𝑢 ℎ𝑎𝑣𝑒 𝑡ℎ𝑒 𝐵𝑒𝑠𝑡 𝑜𝑓 𝑚𝑒,
𝑠𝑜 𝑝𝑙𝑒𝑎𝑠𝑒 𝑑𝑜𝑛'𝑡 𝑙𝑒𝑎𝑣𝑒 𝑚𝑒"

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Naruto chocó los puños con su padre compartiendo miradas complices. Por otro lado, nosotros pensamos que hacer con las Bijuudamas que esa planta está creando, ya que Obito nos encerró en una barrera. Miré al par de rubios y supe que habían pensado en algo.

—Naruto, Hana, él no puede hacer nada, no puede salvar a nadie —habló Obito con una cosa negra comenzando a formar una esfera a su alrededor como escudo—. No pudo salvar a sus madres —lo miré al oír esas palabras—. ¿Saben que día es mañana?

Miré el suelo sabiendo la respuesta.

—El aniversario de la muerte de Minato, Kushina y Seijun. ¡El día en que murieron sus padres! — gritó con calma.

—¿De verdad? —hablé levantando la mirada—. Significa que mañana es nuestro cumpleaños —dije con una sonrisa triste causando la sorpresa de Shisui y Tobirama—. Vaya, será un cumpleaños muy diferente a los demás.

El chakra rojo del zorro volvió a rodear a cada uno de los ninjas y cuando las Bijuudamas fueron arrojadas, nosotros aparecimos del otro lado de la barrera.

Tobirama dió una breve explicación sobre cómo es que logramos estar del otro lado de la barrera, lo cual llamó la atención de mi amigo.

—Conoces mucho sobre mi técnica de clones de sombra, viejo segundo —dijo Naruto con tranquilidad.

—¡Esa es mi técnica de clones de sombra! ¡Yo la creé! —solté una leve risa ante la reacción de mi abuelo.

Naruto y su padre se dirigieron a atacar a Obito, pero algo ocurrió, unas raíces comenzaron a tomar a Shinobis y a debilitarlos. Una logró tomar a Naruto y sin darme cuenta otra me tomó a mi. Mi cuerpo comenzó a sentirse muy cansado y mis ojos se sintieron pesados.

—¡La tengo! —Shisui me tomó entre sus brazos y me llevó lejos de esa cosa.

Mi mirada se dirigió a los ninjas jutsu cuando la tía Tsunade, Ero-sennin y los otros Kages llegan. Una gran explosión llamó mi atención, Naruto y Sasuke están recibiendo una gran paliza de Obito, ambos fueron arrojados contra el suelo.

—Hana, no lo hagas —Shisui trató de detenerme.

Me levanté como pude y de un rápido movimiento me puse frente a mis compañeros.

—¡Hana-chan! —gritó Naruto.

—¡Kage bunshin no jutsu! —creé dos clones que corrieron a curarlos.

—Me encargaré de retenerte —una sonrisa apareció en su rostro.

—Me encantaría, quiero ver la cara de sufrimiento que pondrá tu padre al saber que te maté —se burló.

—Inténtalo —aparecí a su lado, mi pie lo golpeó en el estómago enviándolo lejos.

Solté un suspiro agotada, esa cosa me hizo perder el chakra del zorro y a parte absorbió mucho del mío dejándome agotada, intentaré curar lo más que pueda a ambos.

—¡No me subestimes! —di la vuelta al oír su voz, uno de sus golpes me dio en el rostro tirandome lejos—. No me molestaré en perder mi tiempo contigo, al fin de cuentas estás débil y no podrás pelear bien.

Se acercó a mi y me tomó del cuello levantándome del suelo y colocando mi rostro a la altura del suyo.

—Tendré una parte de mi venganza ahora, aunque no es como la planeé —me soltó dejándome caer.

Tomé un poco de aire y me puse de pie dispuesta a contraatacar, estaba por realizar un jutsu, pero entonces uno de esos tubos negros atravesó mi pierna izquierda. Solté un gemido de dolor manteniendome en pie, mi mirada fue a Obito y otros tubos más se dirigieron a mi. Uno me dió en la otra pierna otro en mi vientre del lado derecho y uno en el hombro izquierdo.

—¡Hana-chan! —me llamó Naruto.

—¡Hana! —gritó Sasuke preocupado.

Obito se acercó con un tubo en su mano derecha.

—¡Hana! —gritó Neji—. ¡No lo hagas!

Miré a Obito decidida.

—Mírame bien, porqué yo no moriré... —sentí un poco de sangre salir de mi boca—. ¡No tendrás esa maldita satisfacción de matarme y ver sufrir a mi padre!

—Estás equivocada, sí la tendré —levantó su mano preparando el ataque—. Ahora mismo.

—¡Hana! —gritó Shisui

—¡HANA! —el grito de la tía Tsunade se escuchó en el lugar justo cuando Obito enterró el tubo en mi pecho.

Escupí sangre mientras caia al suelo con la mirada en el cielo.

—Lo obtuve, ¿Lo ves? Tuve razón —solté una gran risa dejando a todos desconcertados.

Mi risa se escuchaba en todo el lugar, seguramente parezco una loca, como Sasuke hace no tanto tiempo.

—¿Te digo algo? —tomé los tubos y comencé a sacarlos para después ponerme de pie—. Creo que olvidaste algo —apreté mi puño—. ¡Qué soy una Senju, soy hija de Kakashi y soy Hana Hatake! —lo golpeé en el rostro.

Naruto y Sasuke lograron reponerse y se dirigieron a atacarlo.

—¡Gracias, Hana-chan! —solté un suspiro y cuando estaba por dejarme caer agotada, unos brazos me tomaron y en segundo estaba con la tía Tsunade.

—¡Hana! —el abuelo Tobirama me dejó en el suelo y ella se acercó corriendo.

—Estoy bien, solo tengo que descansar un poco —dije con la respiración un poco agitada.

—Bien hecho —puso su mano en mi cabeza—. Has logrado superar a tu propia tía —solté una pequeña risa.

—Gracias —miré a mis compañeros a lo lejos peleando—. Por lo menos serví para darles tiempo.

Neji se acercó de prisa y me observó con seriedad colocándose de cuclillas frente a mi.

—Lo siento, pero ya lo sabes, yo no soy fácil de matar —una sonrisa apareció en su rostro, él besó mi mejilla.

—¡Aléjate! —gritaron Shisui, Itachi y el abuelo Tobirama.