𝐵𝑒𝑠𝑡 𝑂𝑓 𝑀𝑒 ➛ 𝑁𝑒𝑗𝑖 𝐻𝑦𝑢𝑔𝑎

𝙲𝚊𝚙𝚒𝚝𝚞𝚕𝚘 𝚌𝚒𝚗𝚌𝚞𝚎𝚗𝚝𝚊 𝚢 𝚜𝚒𝚎𝚝𝚎

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— 𝐁𝐄𝐒𝐓 𝐎𝐅 𝐌𝐄 —

"𝑌𝑜𝑢 ℎ𝑎𝑣𝑒 𝑡ℎ𝑒 𝐵𝑒𝑠𝑡 𝑜𝑓 𝑚𝑒,
𝑠𝑜 𝑝𝑙𝑒𝑎𝑠𝑒 𝑑𝑜𝑛'𝑡 𝑙𝑒𝑎𝑣𝑒 𝑚𝑒"

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Naruto y yo llegamos a la oficina de la tía Tsunade tras recibir su llamado, al parecer nos tiene que informar algo importante, al entrar notamos que Ero-sennin ya se encontraba de vuelta en la aldea así que comenzamos a hablar con él debido a que nadie nadie más parecía querer hablar.

—Estoy mejorando con mi técnica, falta poco para ser la mejor —dije con una gran sonrisa—. Y Naruto ha mejorado mucho.

—Sí, estoy haciendo un gran trabajo.

—Sí, eso escuché, lo estás haciendo bien, Naruto —asentimos.

—Oigan, deberíamos ir a comer a Ichiraku y hablar más sobre nuestros entrenamientos —sugerí.

—Claro que sí —aceptó Ero-sennin.

—Vamos —dijo Naruto.

—Vamos —contestamos los dos siguiéndolo a la puerta.

De pronto Sakura y la tía Tsunade se acercaron, la pelirosa golpeó a Naruto en la cabeza mientras que la rubia loca nos golpeó a Jiraiya y a mi.

—¿De qué nos quería hablar? —pregunté sobando mi cabeza.

—Hay información circulando —la miramos sin comprender—. Orochimaru ha muerto —los tres nos sorprendimos—. Y todo parece indicar que Sasuke lo mató.

—¿Están seguros? —preguntó Naruto.

—Lo escuché de una fuente confiable —afirmó Ero-sennin.

Tiempo después estaba reunida con mi equipo, el equipo de Kiba, Shikamaru y Neji en la entrada de la aldea mientras mi padre y el capitán Yamato hablan.

—¿Cuál es la misión? —preguntó Kiba cuando todos estuvimos reunidos.

—Tenemos que buscar a Itachi Uchiha para encontrar a Sasuke —explicó Sakura.

Shikamaru me miró disimuladamente y yo solo me encogí levemente de hombros.

—Bien, ya lo saben —la tía Tsunade y Ero-sennin se acercaron a nosotros—. Espero que les vaya bien en encontrarlo.

—Gracias —miré a Jiraiya—. Nos vemos, abuelo.

—Tengan cuidado —Naruto y yo afirmamos con un gesto.

— ¡Cuando volvamos nos invita a comer ramen! —comenzamos a correr siguiendo a mi padre.

Luego de un largo recorrido llegamos a una pequeña aldea así que nos detuvimos en el techo de un santuario.

—Esté es el plan, aquí será nuestro primer punto central, haremos una búsqueda de cinco kilómetros en cada dirección, si no encontramos nada, estableceremos un nuevo punto central y repetiremos el proceso —explicó papá.

—¿Y que haremos para comunicarnos? Los radios estarán fuera del rango —habló Sakura.

Mi padre hizo unos sellos y tocó el suelo, todos sus sabuesos aparecieron frente a nosotros.

—Nuestras voces pueden llegar más lejos que un radio y nuestras narices pueden detectar el peligro en un instante —habló Pakkun sobre la cabeza de Buru.

—Ahora explicaré las formaciones de las patrullas —los ocho perros me miraron.

—¡Hana! —corrieron a mi con velocidad, di un paso atrás pero caí con ellos sobre mi.

—Hola —los saludé tratando de ponerme de pie.

—Oigan, dejen a mi hija —los perros se alejaron de mi un poco y me puse de pie—.  Espero que se lleven bien.

—Yo iré con Hana —los ocho se miraron y comenzaron a gruñirse entre ellos.

—Shiba, ve con Hana y Neji —el nombrado se acercó muy emocionado a nosotros.

—¿Qué hay de mi? —preguntó Naruto.

—Naruto, eres uno de los jinchuriki que ellos buscan, solo en caso de que llegaras a involucrarte en una batalla, irás con Yamato, Shikamaru y nuestra guía, Hinata —ordenó mi padre. 

—Junto con Buru que ladra muy fuerte —el perro más grande se acerco a él.

—Kiba y yo ya tenemos un perro cada uno, dado que ambos somos Shinobis de perros ninja —señaló a Pakkun en su hombro.

—¡Vayan! —y dicho eso todos nos dispersamos.

Neji y yo comenzamos a caminar en compañía de Shiba.

—El otro día te fuiste con Shikamaru —habló interrumpiendo el silencio.

—¿Eh? Oh, sí, tenía que hablarme de algo —dije mirando a los lados esperando encontrar alguna señal de Sasuke.

—¿De qué? —lo miré con una sonrisa burlona.

—Sobre una misión —besé su mejilla—. Ahora concéntrate en la misión.

—De acuerdo —besó mis labios colocando una de sus manos en mi mejilla.

Al separarnos caminé un poco más adelante al ver a una chica de cabello rojo que mira a los lados de forma sospechosa.

—¿Dónde te metiste, Uchiha? —me giré a Neji—. ¿Ves algo? —negó—. Tenemos que encontrarlo.

Comencé a caminar un poco más, me detuve de nuevo y cuando estaba por agacharme a tocar el suelo, una figura iluminada se vio a lo lejos, era la figura de una estrella.

—Es el chakra de Deidara —murmuré—. Neji, Shina, vamos
—comenzamos a correr en esa dirección.

—¿Creés que se trata de Sasuke? —preguntó corriendo a mi lado.

—Tal vez, pero estoy segura que Sasuke no está solo, creo que formó un equipo, su propio equipo para que lo ayuden a encontrar a Itachi —dije con preocupación.

Al llegar al lugar nos encontramos con nuestros compañeros, pero no está Sasuke, solo la evidencia de una gran batalla entre él y Deidara.

—Tengo su olor —dijo Kiba.

Comenzamos a seguirlo con gran velocidad, saltabamos entre los árboles mientras Kiba nos decía si Sasuke se movía o no.

—Alto —dije haciendo que todos se detuvieran—. Tiene a un ninja sensor, nos está rastreando —me acerque a mi padre—. Esa chica pertenece al clan Uzumaki —murmuré—. Son cuatro en total.

Miré por la dirección en la que se encuentran. Tengo que encontrar a Itachi antes que ellos.