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Capítulo 46

"La indiferencia de Ellie"



NARRA ETHAN


Mi nuevo día comienza para mí. Me miro en el espejo y la verdad, si esa mujer no fuera mi hermana y por dentro estoy saltando de alegría al saberlo, no la quisiera ver nunca más en mi vida. Al decirle mi nombre completo, me dio un puñetazo y si bien no me dejó morado, tengo una marca colorada sobre mi cachete. Es muy notable.

Aun así, ni siquiera me importa responder a las preguntas de Gabriel.

Quiero saber de mi hermana. ¿Cómo puede ser que recién ahora me entero que tengo una hermana? ¿Por qué mamá nunca me dijo sobre eso? Sé que es mi hermana. No caben dudas. No tengo dudas sobre eso. Es mi sangre, mi familia, miembro de mi nueva manada. A pesar de tener amigos, amistades y la seguridad de que nunca me va a faltar una persona como Gabriel, por fin me siento lleno. ¡Tengo una hermana! ¡Y es de mi edad!

Eso me hace pensar: ¿Por qué me dice "niño"? 

Al estar preparado, bajo las escaleras y ya Gabriel había salido para su trabajo. Mejor así. Anoche me hizo mil preguntas y tuve que fingir que unos cinco tipos intentaron asaltarme, y que como soy un lobo, no intenté lastimarlos más que protegerme yo. Mentiras. 

Catalina me dijo que era comprometedor que yo supiera de ella pero aun así, quiero volver a verla. ¿Y si ella conoció a papa? O... ¿y si ella quizás está ahora mismo con nuestro padre? 


Estaba listo para asistir a la universidad y salí unos minutos antes para ir caminando, además, tomé camino por donde posteriormente, horas antes estaba con mi hermana y allí, la cámara en miniatura que recuerdo muy bien dónde la dejó. Ella también está intentando averiguar más sobre los casos misteriosos de esta ciudad y sé que juntos, podemos hacer muchas cosas e incluso, aseguro al decir que llegaremos a la raíz de todo. No lo aseguro, lo afirmo. Al llegar, me sorprendí al ver que el cuerpo no estaba, las manchas de sangre tampoco, pero sí, la cámara.

¡Esa cámara es el indicio de quién recoge a los muertos! ¡Es un gran avance! 

Al arrimarme a la puerta principal de la universidad, noté a Raymond y a Hellen, la cual, se lanzó a abrazarme y me dio un pequeño y corto beso en mis labios, y eso sí que me sacó de mi órbita. 


—¿Acaso se formó una nueva pareja y me entero ahora? —reclama Raymond con una sonrisa picarona mirándonos a mí y a su amiga.

—No precisamente, pero —Hellen se separa de mí y me mira —, ¿esta tarde a la salida de la universidad podemos hablar?

—S-Sí —respondí nervioso, no me esperaba esto —¿Y dónde está Ellie? 

—Creo que ayer fui muy dura con ella, respecto a lo qué pasó con la abuela. Ellie no quiere ni mirarme a la cara y el día de ayer estuvo evitándome.

—Esta mañana llegó y no quiso hablarnos, sólo se sentó a leer —informa Ray con una tonalidad preocupante.

—Insisto en que es mi culpa —sostiene Hellen —, ¿vamos a acercarnos?


Asentimos de acuerdo y nos acercamos a Ellie, y quedo pasmado al notar que estaba indiferente; no se trataba de la Ellie cariñosa y dulce que siempre estaba allí en la entrada con una tímida sonrisa delicada, no. Esta "Ellie" ni siquiera se molestó en pronunciar un "buenos días", simplemente nos miró por encima de su lectura como si fuéramos unos simples desconocidos y continuó con su libro.

Los tres nos miramos desconcertados sin saber cómo sobrellevar la situacion. 

El timbre que estaba dando el inicio de las nuevas cursadas se escuchó, y la semana próxima comenzarían los parciales, todos nos encontrábamos estudiando a pleno los temas dados este primer cuatrimestre. Raymond y Hellen se miraron dando a entender que debían retirarse y lo hicieron solo que Hellen me acarició el hombro y Ellie, lo notó.

Al marcharse, Ellie también lo hizo pero la sostuve del brazo.


—¡Ellie! —la sujeto sin oponer fuerza y ella se detiene y me mira —¿No te gustaría que hablemos?

—En este momento no quiero hablar con nadie, perdón —dice con su voz temblorosa.


La solté.

Sus palabras me mostraban que no solamente estaba molesta con Hellen. Incluso, hasta dudo mucho que sea por eso. Es como si no quisiera hablarme, como si quisiera alejarme de su lado, pero no entiendo el porqué. Ellie se agachó para tomar algo que estaba caído sobre el pasto, acomodó sus prendas sacudiendo las hojas que quedaron en el y se retiró sin ni siquiera mirarme.

Admito que esa actitud sí me dolió. ¿Qué puedo hacer para saber por qué está así conmigo? 






¡Buenas, patas lobunas con tierra! ¿Cómo estan?

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¡Buenas, patas lobunas con tierra! ¿Cómo estan?

¿Están de acuerdo con que nuestro mini Ethan sufra un poco para que se dé cuenta de una vez por todas que nosotras estamos fascinadas y apoyamos el #TeamEllie ? Esperemos a ver qué pasa con esos dos...

¡Espero que disfruten la lectura! 


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El Alpha de las tinieblas: El comienzo de un finalDonde viven las historias. Descúbrelo ahora