Capítulo 6

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En el capítulo anterior de El Resurgir de los von Carstein, otros 6 años habían pasado, y durante ese tiempo Konoha estuvo buscando a nuestro protagonista, ya que habia desaparecido, donde Hiruzen estuvo pasándolo muy mal, porque el Daimyo se habia metido de por medio al saber que el hijo de la Princesa de Uzu estaba desaparecido estaba demasiado cabreado con el viejo mono.

Por otro lado, en la entrada de la aldea oculta entre las hojas, dos personas, que eran Naruto y Tayuya llegaban a la aldea.

P. O. V. Normal

Konoha, oficina del Hokage

Hiruzen: Perfecto. Dijo Hiruzen al leer la carta que recibía desde la misma capital del País del Fuego, ya que en la misma se le informaba que el Daimyo habia sido asesinado, por lo tanto, su hijo mayor heredaba el trono, y al ser uno de los aliados de Hiruzen, básicamente todas las amenazas que le impuso su padre estaban eliminadas. – Ahora sin la amenaza del estúpido de Ichiro tengo manga ancha para aumentar mi control sobre la corte del Fuego, y tener el tiempo que quiera para buscar al maldito de Naruto -. Comento con una sonrisa impregnando su rostro, ya que él habia planeado su muerte con una dosis de veneno cada día, hasta que lo mato de unos dolores por todo el cuerpo, que generaba un dolor tan grande que podías llegar a ver la muerte con buenos ojos.

Anbu Sarutobi 3: Hiruzen sama, los ancianos han convocado una reunión del consejo y le están esperando. Le dice uno de los anbus de su clan con una voz llena de desprecio por haber sido ordenado por Danzo llamar a su líder, ya que en su pensamiento no debía ser ordenado por nadie excepto el líder del clan Sarutobi, como todos los miembros de ese clan tenían grabado en su mente.

Hiruzen: Veremos que quieren esos bastardos ahora. Comenta Hiruzen suspirando, ya que los civiles no paraban de exigirle más poder, y él pensando que los tenía bajo control se lo entregaba a cambio de su ayuda, sin embargo, los civiles no iban a cumplir nada, porque pensaban que no debían nada a Sarutobi, porque el poder que les daba les era dado por derecho. Por otro lado, Danzo se encontraba muy, pero que muy callado y eso le preocupaba, le habia dejado moverse y expandir su División de anbus en las sombras para apoyar a Konoha cuando llegase el momento, pero por eso no significaba que el viejo halcón de guerra estaba expandiendo su influencia en la Administración de la aldea y de la Academia, con el 25% de los profesores de la Academia y un tercio de la Administración de Konoha siendo leal a su persona, mientras que el resto estaba apoyando a Hiruzen o los civiles, salvo los pocos miembros de clanes que estaban en la Administración que daban algo de batalla.

También los líderes de los clanes habían estado comportándose de una manera muy extraña, porque directamente no le habían plantado cara en cualquier idea que planteaba al consejo, y Hiruzen esperaba que estuviesen en contra, por qué les debilitaba. Y para los de su clan pensaban que era que al final habían aceptado su dominio, pero para él no era eso. Ellos ocultaban algo, y estaba intentando saber exactamente el motivo de que su lucha se detuviese, y sus espías habían conseguido saber que todos se comunicaban con la misma persona, una tal Vlad von Carstein preguntándole sobre Naruto, por lo que movilizo a todos sus hombres para localizar a ese tal von Carstein y a nuestro protagonista para controlarlos y convertirlos en armas, ya que en los viejos documentos de su clan hablaban sobre un clan llamado von Carstein¸ que se decía que tenían el poder de la vida eterna.

Por otro lado, notó que en el País del Fuego habían ocurrido algunas desapariciones extrañas de personas, algunas sin importancia, unos miseros campesinos que no importaban, pero también algunos nobles o hijos de nobles desaparecieron causando, que un sentimiento de terror se expandió por los altos cargos de las Provincias de Hi no Kuni, del consejo del País y de la mismísima Familia Imperial, provocando que el Daimyo exija a Hiruzen que mueva a sus shinobis a buscar al asesino o asesinos y llevarlos a la justicia, ya que hace unos días se pudo encontrar un cadáver de los asesinados, un noble que tenía un rostro pálido como la leche impregnado de terror puro, además de expandir un hedor insoportable para la mayoría de la población.

El Resurgir de los von CarsteinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora