Capítulo 37

205 21 0
                                    

En el capítulo anterior de El Resurgir de los von Carstein, el Daimyo de Hi no Kuni se adentraba en el complejo Uzumaki para exigir a nuestro protagonista que le entregase las cuentas de su clan y a Isabella, negándose Vlad desde el comienzo.

Por otro lado, tiempo después recibía una carta por parte de Karin que le informaba de una noticia de que su madre seguía con vida.

P. O. V. Normal

Konohagakure no Sato, complejo del clan Uzumaki

Ya habían transcurrido dos semanas desde que Naruto recibió el mensaje de Karin diciéndole sobre su madre, provocando que el líder del clan Uzumaki se volviese loco al enterarse de la noticia; todo este tiempo ella había estado viva, ahora todo encajaba y comprendía el motivo de porque no la encontró en Uzushiogakure no Sato en forma de fantasma: el maldito de Danzo había hecho de las suyas.

Desde ese momento Isabella ha tenido que calmar a Naruto para que no se lancé directamente contra el viejo halcón de guerra, sabiendo de antemano que cualquier movimiento sería aprovechado por Hiruzen para intentar controlarles, y no iban a aceptar eso, pero tampoco podían enseñar al mundo todo el poder que tenían.

Una de las pocas cosas que les dieron una burbuja de aire para replanificar sus planes fue que nadie creyó a los civiles y shinobis del consejo que contaron los poderes nigrománticos de Isabella, ya que cuando dijeron que el propio Daimyo sabía sobre esto y él desmentía esas declaraciones, diciendo que eran unos locos que planeaban derrocarle, pues nadie les hizo caso y fueron rápidamente olvidados por la gente de Konoha, haciéndoles perder su poder político que fue aprovechado por los buitres de los ancianos para crecer, sobre todo, Hiruzen al querer tener más presencia dentro del consejo de la aldea.

Con todo eso en la cabeza, lleno de una rabia que se esparcía a su alrededor, aterrorizando más todavía a los civiles y shinobis, que pensaban que el demonio había desatado su poder para avisarles que pronto acabaría con ellos. Por esa razón cientos de civiles se formaron en grupos o turbas para intentar asaltar el complejo del clan Uzumaki. Ante esas locuras dominando el cerebro del ganado, nuestro protagonista les dejo entrar, cerrándose todas las salidas en el momento que se adentraban para ser atacados por sus soldados no muertos, felices en silencio de acabar con los idiotas que molestaban a su amo, les gustase en vida o no.

En ese lapso de tiempo recibieron un mensaje por parte de Kakashi; en ese mensaje se le dieron los papeles para poder ingresar en los Exámenes Chunnin. Él no se acercó sabiendo en que estado se encontraba podría salir escaldado y, por lo tanto, envío a uno de sus perros ninjas para hacerle llegar el rollo de sellado.

Cuando recibieron ese mensaje con los papeles para firmar una oscura sonrisa pensando en todo el dolor que iban a causar a Hiruzen y el consejo entero, poco les importaba si los amigos de los padres de Naruto sufriesen por el camino, eran daños colaterales para un objetivo mayor: dominar el consejo y, por ende, Konoha.

Rápidamente el matrimonio von carstein movieron fichas y enviaron cientos de mensajes a sus subordinados, ordenándoles planificar diferentes planes para atacar la base de Danzo durante los Exámenes Chunnin, momento que se revelarían al mundo y darían el primer golpe a esos arrogantes y confiados humanos; la arrogancia de Danzo al intentar controlar y dominar a la madre de Vlad seria su perdición; la mente de von carstein ya planeaba miles de formas de torturarlo sin llegar a matarlo, la muerte seria una delicia y un regalo para esa persona.

Dejando eso de lado, el día para la primera prueba de los Exámenes había llegado, por tanto, los dos vampiros que residían en Konoha salieron de su hogar, con paso relajado y oscuro, asustando a todo el mundo por donde pasaban. Para estos momentos el miedo que infundían en la población de la aldea oculta entre las hojas era una bebida exquisita que los dos gobernantes de Uzu no Kuni se deleitaban cada cierto tiempo, disfrutando de como el miedo se implantaba en sus corazones y se reflejaba como un libro abierto a través de sus ojos.

El Resurgir de los von CarsteinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora