Capítulo 85

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En el capítulo anterior de El Resurgir de los von Carstein, Kaze no Kuni cae ante los Von Carstein mientras Saul von Carstein se sitúa en la frontera con Shimo no Kuni.

P. O. V. Normal

Hi no Kuni, Konohagakure no Sato, Base de Raíz

La base de Raíz estaba en un completo silencio salvo por el sonido repiqueteante del bastón del viejo Halcón de Guerra al caminar.

Shimura Danzo recorrió los pasillos, salones y puentes de sus dominios sin decir palabra alguna. Su rostro era una máscara de hierro y hielo, no dejando ver ninguna emoción en el exterior, por mucho que en el interior estuviese habiendo una tormenta interna.

Durante todo este tiempo, desde que salió del hospital luego de la paliza sufrida a manos de Tsunade en el Estadio de los Exámenes de ascenso a Chunin, notó cómo iba perdiendo apoyos en la Administración de la Aldea contra personas capacitadas para sus puestos y, sobre todo, leales a la actual Hokage.

Danzo: (Puede que hayas ganado algo de poder, Tsunade, pero no me has derrotado en la guerra). Pensó lleno de furia al recordar como pulverizó cada uno de sus huesos con ese maldito brillo de satisfacción en sus ojos, como disfrutaba haciéndole daño. El fantasma de sus costillas rotas surgió de repente, teniendo que rechinar los dientes al soportar el dolor y no decir nada, ni un gruñido ni gemido de dolor. - (Verás que pasa cuando alguien desafía a Shimura Danzo).

Atravesó el espacio hasta llegar a una inmensa sala rectangular de varias decenas de metros de largo y la mitad de ancho. La luz natural no accedía tan bajo tierra, por lo que de la iluminación se encargaban unas lámparas en el techo que daban al lugar un ambiente tétrico, oscuro y macabro, casi como una sala de tortura del Departamento de Interrogación y Tortura que dirigía Morino Ibiki destinada a los sujetos de alto valor.

Sus ojos escanearon todo el lugar visualizando los más de dos mil Anbus estacionados solamente donde se encontraban. Eran su élite, su flor y nata, porque en otras dos salas iguales a esta aguardaban el mismo número de efectivos, pero no tan experimentados.

Se sorprendió que todavía le quedarán tantos hombres bajo su servicio. El ataque que sufrió durante el período de los Exámenes de Chunin lo debilitó mucho, más cuando le arrancaron a Homura de su lado y perdió a Uzumaki Kushina.

Danzo: (Por el bien de Konoha, por el bien de este mundo, tengo que derrocarte, Senju Tsunade. Eres una amenaza que pone en peligro la estabilidad vigente. Cuando esté al cargo haré que Konoha vuelva a su antigua gloria). Pensó Danzo de manera hipócrita, sabiendo que en parte el nivel de los shinobis en general había disminuido por su culpa al dejar hacer y deshacer durante mucho tiempo a los civiles del Consejo, pero no le importó, incluso se justificó, teniendo en cuenta que hizo eso para acabar con Hiruzen para él subir al poder. Dejó eso de lado y comenzó a reflexionar sobre los planes de batalla que implementaría para tomar el control de la Aldea. - Hoy comenzará un nuevo régimen. Desde el mismo instante que extirpemos las podridas hojas de nuestro hogar podremos comenzar a salir del estancamiento en el que nos topamos sumergidos por culpa de la incompetencia de Sarutobi Hiruzen y la borracha de la nieta del Shodaime Hokage.

El silencio volvió a apoderarse de la sala, envolviendo a los soldados de Danzo junto a la oscuridad, casi parecía que estaba arrullándolos para que cumpliesen con éxito las órdenes de su amo. Eso era de lo poco que podían llegar a pensar por sí mismos esas máquinas sin emociones.

De repente surgió un Shunshin no Jutsu (Jutsu de Teletransportación) del que salió un Anbu con rango de capitán arrodillado para informar a su señor. Tras un simple asentimiento de éste comenzó a hablar con un tono seco, frío, sin emociones y opaco.

El Resurgir de los von CarsteinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora