En el capítulo anterior de El Resurgir de los von Carstein, la Gran Maestre de los Templarios de Drakenhof y el Sanguinario del Remolino tuvieron que liderar conjuntamente una legión de muertos para detener el avance de los Skavens del clan Pestkrieg, clan vasallo del poderoso clan Pestilens.
P. O. V. Normal
Reino del Caos, fortaleza del Elegido
Archaon estaba furioso; la rabia dominaba su cuerpo, circulaba por él y se creaba al mismo tiempo que se extinguía, como una llama que se autoalimentaba.
Ahora mismo se encontraba sentado en su trono, observando con una mirada inquisitiva y mortal a todos los paladines y demonios del Caos presentes; todos a excepción de las Espadas del Caos se sentían atemorizados, mientras que la guardia personal de Archaon se mantenía en silencio absoluto, con sus ojos mirando cualquier movimiento con sus cuerpos tensos, preparados para asesina ante la orden de su señor.
El último Gran Elegido del Caos no estaba de buen humor, ¿el motivo? Los Skavens.
Cuando finalmente parecía ser que tras la traición de la maldita deidad y creadora de esas ratas iba a firmar una tregua con ellos, los hijos de la Gran Rata Cornuda habían vuelto a traicionar a los Dioses del Caos con la masacre de toda la raza de los Enanos del Caos en sus ataques iniciales, privándoles de la ingeniería maldita y pervertida de la raza de los dawi. Ante ese acto declarado de traición y reanudación de las hostilidades, las huestes tantos humanas como sobrenaturales de los Poderes Ruinosos respondieron al golpe producido por los Skavens, lanzándose al contraataque; cayeron sobre sus innumerables legiones, masacrando cientos de miles de enemigos los primeros días de la ofensiva.
Con el panorama de esta guerra improvista, ya que esperaba enviar las huestes de los cuatro dioses a los Reinos Mortales, el Campeón de los Dioses Oscuros había desatado su furia y frustración sobre sus enemigos, pero las noticias contradictorias de grandes victorias aplastantes y humillantes derrotas le habían forzado a Archaon a detener la persecución personal del contingente principal Skaven, agrandando todavía más si cabe las llamas de su interior, rugiendo ante la locura realizada por los Skavens.
Stryzhir: Esas malditas ratas han retrocedido en todos los frentes. Millones de sus congéneres se encuentran muertos y pudriéndose en el suelo para orgullo del Dios Nurgle. Por otro lado, Valkia la Sanguinaria ha penetrado en el frente hasta llegar a atravesar las líneas Skavens y poner bajo asedio varias de sus fortalezas; Bolorog comanda su hueste de plaga que ha destruido por completo a vastos ejércitos enemigos, incluso ha llegado a tomar varias ciudades y fortalezas. Le comenta Stryzhir, el Oscuro, uno de los Señores del Caos al servicio del Elegido desde hacía relativamente poco. Su cabello era una horrorosa imagen de cabello mugriento y sin arreglar de color oscuro; ojos azules como el mar antes de ser contaminado; portaba una armadura de pieles y empuña dos grandes hachas. – Las legiones de Tzeentch han contenido el avance enemigo, y las tropas de Slaanesh, aunque han ganado sus batallas, se encuentran en un estado critico a espera de refuerzos -. Le comenta el panorama de las tropas al servicio de los Dioses Oscuros.
Archaon: Quiero que Valkia arrase con todas esas malditas ratas. ¡No quiero a ninguna con vida! Brama desplegando una onda de poder mágico para dar a entender su punto. – Que Ghorach y su legión marchen para apoyar a las huestes de Slaanesh; por otro lado, haced llegar a Bolorog que quiero a las Legiones del Censo y las vastas huestes del Padre de la Plaga en marcha en contra de los Reinos Mortales, es la hora de invadir las tierras protegidas por el falso dios, y un mar de ratas no me va a impedir mi venganza -. Le ordena para ver como varios lugartenientes de los Dioses del Caos van yéndose de la sala para enviar los mensajes. – Stryzhir, que las tropas estén listas para marchar en una hora. Quiero a todas las legiones, tribus y huestes de humanos y demonios que han jurado seguirme a la guerra listos para partir a la masacre. Pronto Khorne verá ríos de sangre y pilas de cráneos en su honor; Nurgle observará complacido como la enfermedad campa a sus anchas sin que nadie se lo impida; Tzeentch verá como todo cambiará para siempre; y los esbirros de la lujuria y el placer verán finalmente libre a su líder, Slaanesh lleva mucho tiempo prisionero -. Le brama a su subordinado para que este de un cabeceo estando de acuerdo y se marche con paso decidido y marcial a enviar las órdenes a sus deliberados líderes, el sonido de las armaduras no paraba de sonar en la habitación, multiplicándose. – ¡La Era del Caos volverá! -. Grita desenvainando a Matarreyes y viendo, complacido, como los grandes demonios que se encontraban junto a él haciendo un coro de voces, destacando más los seguidores del Dios de la Sangre haciendo replicar el metálico choque de sus armas contra sus armaduras o cuerpos.
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El Resurgir de los von Carstein
FanfictionDescripción: Millones de años han pasado de El Fin de los Tiempos. El Imperio, los No Muertos, los Altos Elfos, los Hombres Lagarto, los Enanos, los Pieles Verde, los Ogros, incluso las grandes huestes de los Dioses Oscuros del Caos han desaparecido...