Daylight - Inspirada en Loki

Recuerdo

LOKI

Cuando desperté Aurora ya no estaba, anoche habíamos pasado un nivel que no se sentía seguro porque el alcohol de los mortales había sido el impulsor, desde que la había visto con aquel vestido verde que apenas la cubría había deseado dormir con ella.

En el momento que llegamos al orgasmo pude ver como su piel tomaba el brillo que tanto había llamado mi atención, su rostro extasiado completamente llena de mi, brillando con la luz que su naturaleza de Diosa le hacía desprender formaron el recuerdo más preciado que mi mente guardaría hasta el Ragnarök.

Me vestí a medias y salí de su cuarto. Selene iba saliendo del suyo.

— no dejan dormir par de pervertidos — dijo sonriendo.

— buenos días y lamento el ruido que hicimos — no podía negar que habíamos hecho bulla, aunque las bromas de la Luna no caerían bien a la tímida diosa del Amanecer

— en realidad Loki no los oí — mordió sus labios como si hubiera hecho una travesura.

— no molestes a Aurora con esto, déjame manejar la situación — sabía que era capaz de ir a interrogar a su hermana y eso haría que Aurora se pusiera a la defensiva.

— bien no me voy a meter pero me debes algo a cambio.

— ¿Qué quieres? — acepte de inmediato.

— Vas a enseñarme a lanzar dagas.

— vale... déjame asearme y empezamos tus clases — le dije antes de entrar a mi habitación perdiendo mis pensamientos en los recuerdos de la noche.

Desayune con Selene mientras me contaba historias de caza, hablaba mucho en comparación de su hermana. Quizás su vida había sido más libre ya que desde niña había dedicado su tiempo a andar detrás de animales escoltada con ninfas, en cambio Aurora había sido criada tal cuál princesa en compañía de Afrodita quien al principio envidiaba su belleza, pero terminó por hacerla su pupila para enseñarle a ser delicada y femenina.

— Parece que dejaste a mi hermana muy agotada Loki de Asgard.

— no hables de eso Selene, es nuestro acuerdo.

— amargado — dijo y se levantó caminó al balcón donde puso un blanco. La seguí riendo, al llegar le presté mis dagas.

— Bien, primero trata de sentir el peso de las armas, luego usa tu mano dominante para sujetar el mango. — Selene hizo exactamente lo que le pedí.

Era hábil con sus manos.

— Ahora trata de mover su brazo pero no la muñeca, ahora lo lanzas con ayuda del impulso — dije, después de varios intentos aún no lograba clavar los cuchillos en el blanco. — bien, me voy a acercar y guiar tu brazo desde atrás así enseñarte como lo haría yo — ella hizo un gesto de aceptar mi propuesta, me acerque la tome de la cintura para que se quedara más derecha y guíe su brazo, tiré con ella de la daga que dio a un espacio del centro, ambos sonreímos, pero un respiro ahogado nos hizo girar.

Aurora estaba parada en la sala del departamento con una taza en la mano mirándonos atónita.

Me separe de Selene de inmediato, los ojos de Aurora se llenaron de lágrimas y parecía petrificada, no necesitaba oírla para saber que la escena anterior la había impresionado.

Caminé junto a ella para acercarme y tocar su rostro limpiando sus lágrimas pero no se movió. Selene la llamó por su nombre, Aurora seguía inerte en su lugar dejando caer pesadas lágrimas por sus hermosos ojos dorados.