009. El profesor que odia a todos.

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Sus alertas se encendieron cuando una almohada fue a parar directamente hacia su cara. Pansy la miraba desde su escritorio mientras se colocaba su corbata.

—Ya —dijo la ojigris, que apenas podía mantener los ojos abiertos. Parkinson la miró con severidad.

—Si vamos a ser compañeras de habitación seguiremos la regla de la otra —murmuró Pansy, echándole un rápido vistazo al reloj de su muñeca y se levantó de la silla—. Tienes veinte minutos para estar lo más arreglada posible. No voy a llegar a tu lado en las clases si pareces un espantapájaros.

Pansy continuó peinando su cabello tranquilamente mientras Black renegaba y se metía al baño. Minutos después, se aseguró de que no quedase una sola arruga en la túnica de Charlie y se cercioró de que su corbata estuviera bien puesta. Parkinson solo sonrió de lado y aplaudió.

—Ya te ves digna de permanecer en Slytherin —dijo ella, caminando hacia la puerta luego de tomar sus cosas—. ¿Tienes todo?

—Creo que no se me olvida nada —contestó Charlie, siguiendola. Ambas salieron de la habitación quedando frente a la puerta y viendo cómo ahora sus apellidos estaban grabados en esta en un color verde esmeralda.

"Black, Parkinson".

—Nada mal —comentó una orgullosa Pansy—. Bien, vamos o llegaremos tarde.

Black la miró incrédula. Estaba consciente de que era su primer día, sin embargo le parecía un acto un poco extremista bajar de la habitación una hora antes.

No pudo creer cuando la mayoría de alumnos de su casa estaban debajo, conversando y arreglándose para ir al Gran Comedor.

—¡Me va a ahorcar, Malfoy! —escuchó Charlie decir a Theo, que movía sus manos desesperadamente dándole pequeños manotazos a Draco, quién tenía sus manos en la corbata de Nott.

—Solo intenta parecer decente por única vez en tu vida —gruñó Draco. Pansy aclaró su garganta y ambos se enderezaron de inmediato.

—Nott, solo son unas horas —suplicó la pelinegra, que pronto se encaminó hacía el sillón en donde se encontraba Theodore.

Comenzó a acomodar la corbata de su amigo hasta que casi que la cara de Theo se pone violeta, fue solo allí cuando Pansy se sintió ligeramente satisfecha.

—Unas horas mi cola, esto me aprieta —siguió quejándose Nott. Pansy suspiró y se levantó.

-Vamonos.

—Bromeas, ¿cierto? —preguntó Charlie. Pansy arqueo una ceja—. ¡Parkinson, falta una hora para que las clases comiencen!

—Black —la llamó Draco. Charlie los miró confundida—. Las ideas y valores de un chico es las que lo hace ser un hombre. No puedes llegar tarde a todos lados, eso es impropio —colocó una mano en el hombro de Charlie y sacudió su túnica—. Te has involucrado con las personas correctas por fortuna para ti, y te enseñaremos todo lo necesario para ser la Slytherin más pura y digna que haya pisado Hogwarts.

—Creo que es la primera vez que Malfoy dice algo coherente —murmuró Theo, apresurándose a caminar hacia la salida.

Ellos estaban seguros de que ella los seguiría, por lo que no se inmutaron mucho para asegurarse de que los seguía. Black tomó la delantera entonces, negándose a caminar detrás de ellos.

La herencia de la Serpiente; (𝑯. 𝑮𝒓𝒂𝒏𝒈𝒆𝒓)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora