031. El galán de Hufflepuff.

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Pansy bajo saltando las gradas con una sonrisa de oreja a oreja. Aquel día, Draco le había pedido que supervisara a Charlie ya que él haría un par de cosas importantes.

Y si, con cosas importantes se refería a que debía ayudar a Harry a entrenar. Charlie no estaba ni lo más mínimamente interesada en qué tipo de entrenamientos eran.

Los días iban pasando con rapidez y todos notaban cada vez más como ella lo único que hacía era estudiar y entrenar. Del campo de quidditch a las clases, de la clase a las bibliotecas, de las bibliotecas a la sala común y de allí, de nuevo al campo. Claro que restando los tiempos en los que comía, dormía y mantenía su higiene personal. En resumidas palabras, no tenía tiempo para absolutamente nada. Nadie sabía a donde iba después de clases aunque corría el rumor de que había conocido a alguien. Era totaemte diferente, después de clases iba con el profesor Lupin el cual le enseñaba algunos hechizos.

Pero como nadie sabía la mayor parte de la historia, en Hogwarts corrió el rumor de que Charlie tenía novio. No le importaba mucho, de hecho le daba un poco de gracia. Pansy ya la había descubierto, Charlie trataba de mantenerse ocupada para evitar pensar en otras cosas.

En Hermione, resumiendo.

Antes de que Pansy llegara a ella, vio como un chico se apresuraba en escoba. Aterrizó frente a su amiga, tenía una sonrisa encantadora, era extraordinariamente guapo, de pelo moreno.

-Black, ¿no? -Charlie miró para todos lados y lo volvió a mirar a él, negando.

-Nope.

El sonrió.

-Soy Cedric, Cedric Diggory. Capitán y buscador del equipo de Hufflepuff. He estado mirando tu entrenamiento, es casi igual al mío, podríamos entrenar juntos si quieres.

-No estoy interesada, Diggory. -él soltó una risita.

-No estoy hablando en ese sentido. Te hablo en el sentido de que te vi con los gemelos Weasley y pareces divertida. Me gustaría ser tu amigo, ¿que dices?

-¿Crees que esto es pre-escolar? ¿Que si te doy la mano seremos mejores amigos por siempre y para siempre? -Cedric se encogió de hombros aún sin borrar su sonrisa, parecía agradable. -si, acepto.

Mentiría si dijera que no le había parecido atractivo. Tenía su encanto. Se quedaron platicando por varios minutos hasta que Pansy se cansó de fingir que era una estatua y decidió intervenir. Charlie se despidió de Diggory y ambas fueron a la sala común.

-¿Así que Diggory? -preguntó Pansy lanzando su abrigo sobre su cama. Charlie la miró arqueando una ceja-. ¿Será él quien te hará olvidar a la sangre sucia?

-No le digas así, Pansy. -muemuró Charlie con el ceño fruncido. Parkinson suspiró.

-Como quieras.

Se quedaron calladas por minutos. Charlie estaba mirando ropa en el clóset y buscando su corbata para ir a darse un baño mientras Pansy leía sobre su cama.

-Deberias hablar más con él. -dijo Pansy de repente. Charlie se volteó con una media sonrisa. -lo digo en serio. En verdad, te hará bien distraerte un poco.

-Hay partido de Quidditch en unos días, lo comentaste hace poco en el periódico escolar. «Black contra Potter, Slytherin contra Gryffindor» eso pusiste, te lo recuerdo.

-Charlotte, ni tú te crees eso de que entrenas para los partidos. Lo haces para mantener tu mente ocupada y Cedric Diggory puede mantener tu mente ocupada. No estoy hablando de una relación, estoy hablando de socializar.

-No necesito socializar. Así estoy bien.

-Dijo que sus entrenamientos son similares, ¿Por qué no entrenas con él por las mañanas? Lo he visto salir muy temprano del castillo para entrenar y luego, repite por las tardes. Es asombroso.

La herencia de la Serpiente; (𝑯. 𝑮𝒓𝒂𝒏𝒈𝒆𝒓)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora