𝟎𝟒𝟖

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YESEOL
VEINTE DÍAS.

Con tranquilidad, me acerco a Seokjin quien se encuentra junto a varios de los hombres de Jeon padre, guiandolos por las instalaciones de la casa que han cambiado bastante estos últimos días. Apenas llego a su lado, hacen algo que me causa incomodidad; agachan la cabeza.

No me acostumbro.

—Yess.

—Hola, Jin— me aclaro la garganta— ¿Sabes dónde está mi esposo?

Asiente, con una expresión que denota obviedad.

—Llegó hace media hora, estaba en el sur platicando con uno de los nuevos aliados y de paso verificando el estado de Kim.

—¿Y qué se ha sabido de él?

—Continúa inconsciente, nada nuevo. Jungkook debe continuar ocupado en su despacho.

—Mm... Jeonghan está en Seúl.

—Claro, es muy grande y han perdido a muchos hombres en la toma de territorio. No sé si debería comentar todo esto contigo, así que no diré mucho más.

Blanqueo la mirada, asintiendo.

—Claro. Solo dime algo... ¿Con quién está Jungkook en el despacho?

Relame sus labios.

—El psiquiatra.

—Oh...

Me despido, yo estaba por enojarme pensando en que otra vez Jungkook había decidido saltarse su sesión con el hombre que nos mantiene cuerdos, pero, es una agradable sorpresa el saber que está cumpliendo con su terapia. Su padre estará feliz de escuchar eso.

 Su padre estará feliz de escuchar eso

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JUNGKOOK

—¿Y qué es lo que sigue? ¿Cuál es el siguiente paso?— parpadeo— Lograste tu objetivo principal, has conseguido el liderazgo absoluto, lo que te asegura un estatus y estabilidad para ti y para tu mujer.

—Por ahora, con saber que estamos a salvó y que le he regresado a mi padre todo lo que Kim le arrebató, es suficiente. No me interesa la mafia.

Se extraña por ese último comentario, lo veo escribir y escribir.

—¿Cómo es eso?

—No me interesa. Sé que soy bueno manejando todos estos asuntos y que poseo todos los contactos para mantener este imperio a flote, pero, es lo último que me importa en el mundo.

—Suena a qué nunca estuvo en tus planes ser un asesino...

—¡No!— me río, negando— Voy a explicarle aunque no me va a entender, yo... no estoy interesado en los negocios y todo esto del narcotráfico, sin embargo, me encanta la idea de la muerte en manos propias, es por eso que me uní en primer lugar, para poder desarrollar ese gusto, esa pasión— entrecierro los ojos viéndole— dígame si ha tenido algún placer extraño que nadie más que usted podría comprender.

—Creo que no, todo lo que disfruto parece estar, a mi parecer, en el rango de lo normal y aceptable.

—Mm... que envidia, doctor.

—¿Envidia?

—A veces, solo a veces, me gustaría tener un pensamiento así de correcto que roza lo inocente, porque, eso significaría que tuve la oportunidad de crecer en un entorno sano libre de satanismo y maltratos... tristemente mi historia es muy parecida a la mayoría de todos los que estamos en este mundo. Fuimos tan infelices de niños que ahora... buscamos esa alegría en cosas muy extrañas.

Su pecho se infla, deja de escribir y asiente.

—Y tú encontraste esa felicidad en la muerte.

—En la sangre, doctor.— veo a mis manos, no traigo mis guantes puestos, así que están limpias— Ese es Jeon.

—Hablas de ti mismo en tercera persona.

—No realmente.

Se cruza de brazos, luciendo todavía más confundido.

—Entonces... creí que hablaba con Jeon.

Niego.

—Con Jeon es imposible hablar, doctor— apoyo mi mentón en la palma de mi mano y sonrío— habla con Jungkook.

—Con Jeon es imposible hablar, doctor— apoyo mi mentón en la palma de mi mano y sonrío— habla con Jungkook

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LOCO❝jjkDonde viven las historias. Descúbrelo ahora