JUNGKOOK
Me alejo.
Mi mano cae de su mentón y golpea mi costado, suspiro, sabía que sería difícil, no pensé que tanto, a pesar de que tengo un control decente sobre mis emociones, con Yeseol todo es diferente y tenerla cerca me descoloca en su totalidad, su aroma sigue siendo el mismo que me encanta, sus ojos continúan viéndome con amor y admiración.
Yo sé que su intención es alejarse de mí para evitar la bomba peligrosa que somos juntos, pero me niego a aceptar una vida sin ella. Nací para encontrarla, ella para encontrarme y no lo sé, enloquecer juntos.
Valoro mucho el hombre que soy gracias a ella, mi fortaleza se la debo a sus ánimos, a su incondicionalidad, a sus cuidados y su esfuerzo durante todos estos años por hacerme feliz y complacerme.
—Lo sé— le digo— sé que no hay nadie más en tu corazón.
Su rostro se ha tornado rojo, evita mirarme.
—¿Entonces por qué dices idioteces?
—Descubrí que me gusta ser dramático.
—¿Conociste a alguien durante este tiempo?— asiento, risueño, ella suspira— Oh.
Sonrío un poco.
—Se me han cruzado muchas mujeres, cada una intentando ocupar tu lugar— arquea ambas cejas, luchando por no sonreír pues sabe a qué quiero llegar— pero, como es obvio... estoy atado a ti.
—Que desafortunado.
—Por eso te he traído de vuelta a donde perteneces— señalo la habitación— y este será tu santuario hasta que ambos estemos listos para dar el siguiente paso.
—¿Y ese cuál es?
—Perdonarnos.
Me niego a perderla, estamos enredados uno al otro de por vida, sin embargo, no le he perdonado el haberme dejado como lo hizo cuando miles de veces hablamos sobre que ese sería el peor de los castigos y la peor de las traiciones. Yo estaba cumpliendo mi promesa de no dejarla, ella, claramente lo olvidó y se fue.
Se queda callada, mis manos y acciones se vuelven torpes, pero opté por acercarme un poco, necesitando su cercanía y el calor que su cuerpo emana. Le abracé un segundo, solo eso.
Luego fui hasta la puerta, dispuesto a dejarla descansar.
—¿Es todo?
—No intentes escapar otra vez— ignoro la pregunta— tengo un oído bastante bueno y un personal altamente calificado para traerte a rastras si es necesario.
La escucho bufar antes de cerrar la puerta, ya sin ella viéndome, suelto todo el aire resguardado en mi pecho, corriendo a mi habitación y buscando entre cajones las putas pastillas para la ansiedad. Odio esta mierda de tener que tomar medicamentos cada cinco jodidos minutos.
Eso e intentar respirar profundo para calmarme, me jode.
Soportaste mucho, toda tu anatomía se alteró apenas la viste de cerca.
—No me hables ahora.
Caigo en la cama, mirando el techo e ignorando el sonido de mi celular, sé que es mi padre, pero no tengo jodidas ganas de hablar con nadie y menos con él sobre lo que decidió hacer con nuestra madre, es su problema, yo tengo que resolver mis líos solo, él también podrá.
Vuelvo a levantarme para ir a los cajones, necesitaré las pastillas para dormir, ahora es cuando debo tomarlas, pues si sé que Yeseol está al frente, querré dormir con ella y no puedo hacer eso. Las dejo sobre la mesa junto a la cama, en unos minutos puedo tomarlas.
Me encuentro divagando sobre cierto personaje preocupante.
—Kim Taehyung.
Es evidente que aquél idiota está enamorado de Yeseol, sin embargo... llevo todo el año observándola de lejos y aunque siempre están juntos, él no parece haber dado señales de querer hacerle saber ese hecho.
—Kim Taehyung. Él es fuerte.— reconozco—Min Yoongi también es fuerte.
¿Qué haré? ¿Mm? Tal vez... no, ahora no es conveniente.
—Kim Taehyung— repito su nombre por tercera vez.
Él será un problema más adelante si no lo marco con rojo en mi lista.
ESTÁS LEYENDO
LOCO❝jjk
Fanfic❝¿Mi novio? No, a él no quieres conocerlo, está loco... ¿Qué tan loco? No lo sé, él mata gente, dime tú qué tan demente hay que estar para eso.❞ ➤Portada preciosa de @ohmyjooon.