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𝟎𝟓𝟕

JEON

—De verdad me gustaría saber quién te contó eso— camina de un lado al otro, exasperandome— amor.

—¡No me llames amor cuando estoy cabreada contigo!

En términos honestos, quién es mi progenitor soltó dicha información conmigo presente, acababa de terminar un trabajo y mi forma de amar es muy diferente a la de mi lado romántico.

Supongo que es por eso que yo solo aparezco cuando es hora de mancharse las manos, lo chistoso es que, yo me quedo con los recuerdos completos y Jungkook solo tiene las memorias de cuando está consciente y al control.

Y yo soy un espectador.

—Si no te lo dije, es porque era lo correcto en su momento— no recuerdo haberla visto tan molesta— sabía que si te lo decía, terminarías corriendo en su búsqueda y me dejarías aquí solo. Nos dejarías.

—Pienso que es extremista decir que te dejaría y también pienso que está muy mal hablar por Jungkook cuando él habría sido el primero en ayudarme a ver a Yoongi.

—Eso es porque él no piensa con claridad cuando se trata de tí. Yo soy su parte cuerda, quién sabe lo que necesita para seguir sobreviviendo en este mundo de mierda que le ha tocado y por eso no puedo dejar que lo único bueno que ha tenido en años, se vaya o se salga de mis manos.— relamo mis labios— Ódiame si quieres, pero así son las cosas, Jungkook no tendrá el corazón para hacerte fuerte, pero yo sí.

Nos quedamos en silencio, Yeseol afirma con la cabeza luego de un rato.

—Entonces, yo tengo que aprender a pelear y a matar, tú... ambos, deben aprender a estar sin mí.

—¿Qué?

—Dormiré en el otro cuarto.

Yeseol de verdad está ignorándome, es algo que no puedo procesar o creer.

—Amor, esto es ridículo— ruedo los ojos, estoy de pie en el marco de la puerta de la habitación que eligió para dormir, a punto de perder la cordura— ¡Sabes que no puedo dormir si no sé que estás a mi lado!

—Si puedes, recuerda cómo dormías antes de conocerme.

—No dormía, carajo.

—Pues qué pena.

Entro, termino sentado al borde de la cama, buscando acercarme al menos un poco.

—Por favor.

—No.

—Bien, lo lamento. De verdad, ahora me pesa en la conciencia no haberte dicho sobre algo importante, solo pido que me entiendas, tuve mis motivos— no dice nada— ayúdame un poco, que no soy bueno diciendo estas cosas.

Toma aire, veo sus hombros sacudirse y sé que está discutiendo consigo misma, así que se voltea, me mira, levanta las sábanas y no dudo en acurrucarme en ese pequeño espacio que me brinda, suspirando con alivio.

—Escucha...

—Te necesito. Recuerda que, de hecho, él te necesita más que yo.

—Son la misma persona.

—Si, pero Jungkook es débil, yo soy fuerte para él.

Acaricia mi mejilla.

—Esto va a terminar volviéndome loca a mí. No está bien.

Abro los ojos, le miro fijo.

—No se te ocurra cometer alguna tontería, no te lo permito.

Debo mantenerla aquí.