Cartas de amor a escritores 📖

Capítulo 9

Evan

-¡Sigmund Freud!- se quejó Fred caminando por el pasillo- Freud, el ridículo que filosofaba sobre el "yo" y el "super yo" por cinco volúmenes, para concluir en la nada misma- estaba furioso por el autor que le había tocado- Encima, psicología, la ciencia más estúpida de las ciencias, si quieren mi opinión- agregó.

-Yo tengo a JK Rowling- sonrió Billy, mostrando su papelito- Sé lo que dijo la Señorita Evergreen sobre leer, pero tengo las películas de "Harry Potter" memorizadas, básicamente.

-Al menos, es entretenido- revoleó los ojos mi otro amigo.

-Debería volver a mirarlas, hace bastante que las ví por última vez, ¿recuerdas, Evan?- me tocó el brazo con la mano- Vimos las ocho películas de corrido y yo no le avisé a mi mamá que estaba en tu casa y no atendía el teléfono- se rió fuerte- Creyeron que me había muerto o algo así.

-¿Le tienen que escribir a alguien?- preguntó Fred.

-Yo, a Stephen King- siguió mi amigo- Me gustan mis escritores, al menos, están vivos- agregó- Oye, estás muy callado- volvió a tocarme el brazo- Literalmente, se acaba de cumplir una especie de fantasia sexual para ti y estás como si nada.

Suspiré.

-Me tocó Edgar Allan Poe- dije- Solo recibo.

-Wow, un clásico- soltó Fred sonriendo.

-Si, el tipo es un genio- concordó mi otro amigo.

-Si, lo sé- asentí- Es solo que... nunca lo he leído, la verdad y... no se me hace mi tipo de escritor o cuentos- expliqué.

Era cierto. Jamás había tocado un texto de Edgar Allan Poe y, como lector, me daba un poco de vergüenza admitirlo, porque si, es un clásico, una leyenda. Es tan viejo, pero a la vez tan contemporáneo.

Nunca lo había leído, porque sabía que no me interesaría demasiado. Sabía también, que era bastante complicado de comprender a veces.

Tampoco se nada de el como persona, sobre su vida ¿Si quiera hay datos de hace tantos años atrás?

Yo soy más de la lectura juvenil, más de los clásicos históricos, de los que tienen una metáfora para explicarte y dejarte una eseñanza interesante, los que me dejan pensando sobre mi vida, con los que me identifico.

-Si es cierto, es bastante opuesto a ti- respondió Billy.

-Pero, al menos, te toco algo normal- siguió Fred, aún molesto por su autor.

Obviamente, no estaba decepcionado, ni nada parecido. Aún, me parecía una tarea divertida, y lo iba a tomar, como una oportunidad para poder leer algo de Edgar Allan Poe y del escritor que me llegue también.