Cartas de amor a escritores 📖

Capítulo 41

Penny

El musical estaba tomando forma de a poco. Hemos practicado todas las canciones grupales y ya nos tuvimos que aprender algunas coreografías. Mi favorita, hasta ahora, es "Defying Gravity", la canción del final del primer acto.

También empezamos a repasar escenas, pero no estamos al cien por ciento con eso. Me estoy divirtiendo, no lo niego. Pero, si es mucho trabajo y compromiso.

Otro lado muy bueno, es que no me he peleado con Ariel otra vez, ni física ni verbalmente. Básicamente, ni siquiera estamos hablando, a menos que ella sea Glinda y yo sea Elphaba. Es mejor así, la verdad.

Guardé mis cosas en la mochila y sentí un agarre en el brazo, con un tirón leve. Me sorprendí y quedé justo en bambalinas, a unos centímetros del escenario con Gabe sonriéndome, apoyado en la pared.

-Hola...- me agarró fuerte por la cintura acercándome más a él.

-Me asustaste- solté una risa algo nerviosa. Sigo asustada.

-Perdón- dijo- Estás muy hermosa hoy... Bueno, siempre... Pero... No sé... Tienes como un brillo- siguió y sonreí.

-Gracias- respondí.

Me dio un pequeño beso en los labios y se separó, solo para hablarme.

-¿Sabes que estaba pensando?- preguntó, con ese tono que me hace dejar de respirar.

-¿Qué?

-Lo sexy que va a ser poder besarnos aquí el día de la obra... Es como que está escondido- me guiñó un ojo y tragué con dificultad.

-Ah si- me obligué a reírme.

-¿Qué te pasa?- preguntó confundido, acariciando mi cintura.

-Nada... Es...- negué. Pero, no tengo porque no poder decirle lo que opino de estas ideas que tiene. Pero, por otro lado, no me está pidiendo nada aún, no puedo hablar hasta no estar segura- Estoy con mil cosas, perdona- hablé- Me parece una gran idea.

Ahora, le di yo un beso y me sostuvo más fuerte para que no me separara, esta vez. Gabe sabía lo que hacía, claro que si. No que he besado a muchos chicos, pero me daba cuenta.

A Gabe le gustaba besarme, le gustaba abrazarme, le gustaba tomarme de la mano y puedo asegurar, que le encantaba porner las manos en mi cintura y más abajo también.

Y me di cuenta, que no sé en realidad demasiado de él. O sea si, lo conozco, pero las cosas simples y banales de su vida, no las sé. Sé que no es un fanático de los libros, así que, no tiene libro favorito. No sé su película favorita, no creo que sepa la mía, no hablamos de algo fuera del musical, realmente.

Gabe no es Poe.

Me separé de él con la respiración acelerada y súper descolocada por mis pensamientos. Estoy siendo ridícula.

-¿Qué pasa?- me preguntó.

-Eh...- no entendía nada- Eh... Le prometí a Faith que iría a su casa después del ensayo, así que...- empecé a alejarme de él- Debo irme... Si... Irme- estaba ida, mareada- Te llamo después, ¿si?- le dije sonriendo y caminando. Gabe me miraba muy confundido, pero asintió- Ok, bye.

Salí del teatro básicamente corriendo y con el corazón retumbándome en el pecho, luchando por salir.

Ok, lo que dije es verdad. Gabe no es Poe porque Poe no existe y Gabe si.

No sé quien es Poe y no tengo el mínimo interés en averiguarlo porque, a esta altura, si me entero quien es y él se entera quien soy, sería mí top 1 en momentos más vergonzosos de mi vida.

Poe ya sabía muchas cosas y yo también, así que, seguro él debe sentirse igual. Cada vez que entraba a la clase de literatura, era inconsciente sentirme feliz y a la vez querer morirme, porque había alguien en ese salón que hablaba conmigo por carta.

Ni siquiera me puse realmente a pensar quien podría ser. No quería empezar a señalar sospechosos, porque probablemente, lo descubriría y como dije, no quiero, porque sería un problema.

Porque Gabe no es Poe. Ese es el problema.