Capítulo 64 - Maldición fuiste tu

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Sonsoles corrió lo más lejos que puedo, sin embargo, yo no estaba dispuesto a quedarme con la duda. Necesitaba saberlo, una parte de mí lo ansiaba, sentía que era importante. Así que, bajo ninguna circunstancia dejé que escapara. Ella pretendía llegar al baño de mujeres y encerrarse, mas esto no me iba a detener, de modo que, colocando a mis brazos en la puerta, empujé y me encerré con ella.

—¿Qué crees que haces? Si te acercas un paso más, voy a gritar y estarás en problemas.

—Hazlo si quieres, pero vas a explicarme lo de Letizia.

—Yo no tengo que explicarte nada, no tienes derecho a saberlo, además, seguro cualquier cosa que diga irás a decírselo al estúpido de tu amigo. Ya es suficiente el daño le ha hecho a mi amiga como para seguir tras ella.

—¿Por qué tanto odio a los hombres?

—Porque se lo merecen, son igual que animales, que solo actúan por impulso y necesidad, no piensan solo utilizan.

— Sonsoles ...

—Letizia me contó que él ya sabe quién es el padre de Leonor, imagino que tú también debes estar enterado. La niña necesita un padre, eso es más que evidente, pero eso no cambiará lo demás.

—Acabas de decirme que Letizia estuvo enferma durante su embarazo, y que esto casi le cuesta la vida, ¿qué es exactamente lo que le ocurrió? Ella se mostró muy nerviosa, miraba por todas partes en el baño, buscando alguna manera de poder escapar, para evitar responder a mis preguntas.

—Te juro que no se lo contaré a nadie. Ella me miró con incredulidad.

—Por supuesto, y me crees tan estúpida como para creer que no le vas a contar nada a tu amigo.

—Te juro por mi propia vida que no se lo contaré a Felipe. Nuestras miradas se cruzaron, y por un instante ella bajó la guardia.

—¿Me das tu palabra?

—Absolutamente. Exhalando con resignación, Sonsoles procedió a relatarme los hechos.

—Letizia, sí estuvo enferma durante el embarazo.

—¿A qué te refieres exactamente con enferma? ¿Hipertensión? ¿Preeclampsia? ¿Qué es exactamente lo que le pasó?

—Ojalá hubiera sido eso. Cuando yo conocí a Letizia, ella estuvo a punto de perder a su bebé, el sangrado que ella tenía era abundante, por lo que no dudé en llevarla al hospital más cercano. Allí me enteré de su situación, estaba llevando un embarazo completamente sola, estaba totalmente demacrada, incluso su peso era menor al de una mujer embarazada en ese tiempo de gestación. Cómo sí reviviera los momentos del pasado, Sonsoles bajó la cabeza, mostrando una gran tristeza en su mirada.

—Mi pobre amiga estaba diagnosticada con leucemia.

Con tan solo escuchar esa palabra, cerré mis ojos e imaginé lo duro que debió ser para Letizia vivir con una enfermedad tan dura.

—No me digas eso...

—No tengo porqué mentir, yo estuve presente y fui testigo de cuánto esfuerzo daba para poder sobrevivir a la enfermedad. Llevando a Leonor en el vientre, Letizia estaba soportando el doble de cansancio, no solo tenía los malestares del embarazo, también de la enfermedad que avanzaba en su cuerpo.

En verdad estaba asombrado, haber vivido con esa enfermedad además de haber estado embarazada y logrado sobrevivir a eso era un esfuerzo sobrehumano.

—Pero, ¿por qué nunca buscó ayuda? Sí Felipe lo hubiera sabido, no hubiera dudado ni un solo segundo en estar con ella y apoyarla. Hubiera dado todo por ambas.

AHORA ESTOY DIVORCIADA (Adaptación)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora