Connor Wells la miró con desaprobación pero finalmente accedió.
_ ¿Te parece si te llamo luego?-dijo mientras comenzaba a caminar.
_ Sí, me parece bien.-sonreí.
Se alejó de nosotras dando grandes zancadas hasta desaparecer por la puerta principal.
_ Pensé que nunca se iría.-dijo Melissa echando la cabeza para atrás riéndose.
_ Yo también lo pensé.-reí.
_ ¿Has visto a Rayan?-sonrió
_ No, no lo he visto desde el primer receso, ¿por qué?-pregunté incómoda.
_ No.... Por nada.-dijo mientras ladeaba la cabeza de un lado a otro medio riendo.
¿Por qué me había preguntado por Rayan? Bueno la razón no importaba lo que importaba es que no me gustaba para nada lo que sentía.
¿Pero qué era lo que sentía?
_ ¿Nos vamos?- dijo Melissa al darse cuenta que no me movía de donde estaba.
_ Ahh si claro, perdón.-sonreí
Caminamos hasta el parqueo donde se encontraba el carro de Melissa, era un Renault Megane blanco.
_ Lindo auto.-le dije sonriendo.
_ Gracias, me lo regalaron por mi cumpleaños número 18.
¿18? Esta chica era más grande que yo y parecía menor si la mirabas físicamente.
- Ahhhh.
_ Sé que parezco menor, no te guardes tus comentarios.-sonrió.
_ No es eso.... es solo que.....-dije tratando de buscar una explicación que darle pero bueno, ella tenía razón.
_ Mejor sube antes de que me arrepienta de haberme ofrecido a llevarte.-dijo mientras entraba al auto riendo.
Al entrar a su auto me di cuenta que olía raro, no lograba identificar el olor, pero era extraño. Se recogió el pelo en una cola de caballo y vi que todo el pavellón de la oreja estaba lleno de aretes de diferentes colores.
Recordé cuando hace un año y medio le dije a mis padres que pensaba ponerme todos los aretes posibles en mis orejas y que no iban a poder impedírmelo y tiempo después de expresarles mi idea acompañé a Diana a que se hiciera uno, cuando vi cuanto le dolió decidí que mejor no quería ponérmelos. -Sonreí ante aquel recuerdo.
_ ¿Qué miras?- dijo Melissa mirándome a los ojos intimidándome.
_ Nada-mentí
_ Mirabas mis aretes ¿Qué hay con ellos?
_ Nada, son bonitos-dije
_ Mmm... ¿Dónde vives?
Luego de explicarle los mismo 3 veces y dar miles de vueltas al fin llegamos, antes de bajarme me dijo:
_ Vendrás a la fiesta ¿no?
En este día me habían presionado tanto con eso que era mejor acceder a que siguieran fastidiándome, además empezaba a creer que sería divertido.
_ Cuando llegue a casa las llamaré les diré-sonreí.
_ Ya estás en casa Vale.-sonrió con astucia.
Claramente había sido una treta para que accediera a ir a la fiesta, rayos ¿ahora qué hago?
_ ¿Y bien?-insistió.
- No sé qué ponerme- me excusé.
_ No te preocupes ya habíamos pensado que dirías eso.-dijo pasándome una bolsa negra.
_ ¿qué es esto?
_ Es lo que te pondrás para la fiesta.- sonrió con astucia.
Nunca imaginé que esto pasaría, supuse que al decir que no sabía que ponerme me dejarían en paz.
_ Vendré por ti a las 10:00 pm mañana.
Me bajé sin responder, me estaba avisando no preguntando así que no podía negarme.
Ya eran como las 5:00 pm aun había sol así que aún podía salir un rato a caminar (bueno a explorar). Al entrar a la casa me sentí emocionada por lo que tenía en mis manos, tenía que probármelo, apuesto a que había sido una elección de Nadia, según me di cuenta en el colegio le gustaba verse muy bien.
Cuando me disponía a abrir la bolsa negra para probarme el vestido (suponía que era vestido) Sonó mi celular y vi el nombre de Connor Wells en la pantalla, la verdad no quería responder pero sin pensarlo mi dedo se deslizó por la pantalla y sonó la voz ronca de Connor Wells.
_Hola.
_Hola.-respondí
_¿Vendrás mañana a la fiesta?
_ Sí... Supongo que si.-sonreí.
_ ¿Te llevo?-dijo en tono neutro.
_ No, gracias Melissa vendrá por mí.
Se colgó la llamada y prendí la pantalla para poder devolverle la llamada, cuando entró una llamada de un número desconocido, dudosamente contesté.
_¿Hola?
No se oía que alguien contestara así que repetí un poco más fuerte:
_ ¿Hola?
Sin oír respuesta se colgó la llamada.
ESTÁS LEYENDO
Mi pequeño gran amor. #PGP2016 #PremiosWABooks #CBL (Go Wattys 2016)
Teen FictionTras la muerte de sus padres , Valeria decide ir con su tío que vive en un pueblo a las afueras de Canadá, por las montañas, todo comienza de nuevo, nuevos amigos, nueva escuela, nueva vida. Ahí conocerá a ese pequeño gran amor, ese que hace palpit...