Capítulo 36

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Valeria:

Estando en el auto un hombre corpulento se sentó a mi lado sin apartar la vista de mí.

Seguí gritando y sacó su arma.

_ Cállate.

_ ¡No me callo!.-dije enojada.

Christian pasó una mano por detrás de mi espalda para rodear mis hombros y grité furiisa y asustada:

_ ¡No me toques!

Sonrió y sacó otro pañuelo de su pantalón, poniéndomelo en la boca a la fuerza; esta vez comencé a sentirme mareada.

_ ¿La llevamos a la casa Christian?

_ Sí, tengo una cuenta pendiente con ella.

Eso fue lo último que escuché antes de quedare inconsciente.

Rayan:

Me froté el pelo frustrado y entré a mi auto.

_ Voy a buscarla, ustedes llamen a sus amigas a la policía yo que sé pero ¡Hagan algo!

Patrick y mi madre no intentaron contradecirme, estaba desesperado y no era bueno que intentaran meterse conmigo en este momento.

_ ¿Christian está en casa?-preguntó mi madre.

Puse los ojos en blanco al escuchar que preguntaba por Christian, no había pensado en él.

_ No se.-respondí.

Mi madre tomó su celular y no sé a quién demonios llamó.

_ Christian no fue hoy a la Universidad.-señaló mi madre sin despegar la oreja del teléfono.

Entonces había estado aquí, maldito desgraciado.... Si se ha atrevido a hacerle algo juro que.....

Cerré los puños demasiado fuerte y le pegué al volante del auto, arranqué dejando a Patrick y a mi madre atrás.

Valeria:

Al despertar me encontraba en una habitación pequeña con una cama y una pequeña ventana muy arriba como para ver a través de ella. Me puse de pie con dificultad y me apoyé contra la pared. Se abrió la puerta y entró Christian.

_Ya despertaste.-sonrió.

No respondí y me limité a examinar la pequeña habitación buscando una salida.

_ No podrás salir de aquí.-sonrió mientras cerraba la puerta con llave.

Miré la ventana y tenía barrotes, sería imposible salir de aquí, la única salida era la puerta.

_ Podemos hacer esto por las buenas o por las malas, preciosa.-dijo dando un paso hacia mí.

_ No.-respondí.

Sonrió y sacó un pañuelo de su bolsillo.

_ ¿No? A mí nadie me dice que no estúpida.

Intentó poner el pañuelo en mi boca, tomándome de los brazos para inmovilizarme. Le mordí la muñeca y se quejó de dolor.

_ ¡Agg! ¡Maldita estúpida!

_ ¡Déjame en paz!

Levantó su mano y me dio una cachetada tirándome a la cama.

_ ¡Maldito cobarde!-dije entre sollozos.

Sonrió victorioso y alguien abrió la puerta.

_ ¡Dije que no me molestaran!-gruño Christian.

_ Llegó nueva mercancía.-dijo el tipo parado en la puerta.

_ ¡Ya la veré después! ¡Lárgate!

_ Tiene que ser ahora.

Maldijo un montón de veces y me miró.

_ Tú no te has librado de mí.

Salió del cuarto y comencé a llorar con mas intensidad, ¿Cómo había parado yo aquí? La puerta se abrió y entró el tipo corpulento.

_ Vístete.-dijo arrojando una maleta grande a mi lado.

_ No.-respondí sollozando.

Mi pequeño gran amor. #PGP2016 #PremiosWABooks #CBL (Go Wattys 2016)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora