Un minuto más

LI

12 de enero de 2022

Querida Julia:

Los resultados de los exámenes nos los darán dentro de seis días, es decir, el martes. El doctor no dijo mucho en la consulta, sólo mandó a hacerte ‒como yo ya sabía‒ una larga lista de exámenes y nos aseguró darnos una respuesta más específica apenas los tuviera. Mientras tanto, tenemos que ir al nefrólogo, quien nos asignó una cita para el 3 de febrero; no me agrada mucho la idea de tener que esperar tanto, pero ni modo, tiene la agenda muy ocupada, más bien nos dio esa cita tan «cerca» (según sus palabras) porque el paciente que iba a asistir murió (y a mí me iba a dar algo cuando escuché eso).

Por otra parte, Emilio se pasó por la casa como a las siete de la noche y cenó con nosotras. Su mirada estaba decaída, tal cual como cuando estábamos en la consulta. Sé que nada bueno debe de estar pensando, pero no nos quiere decir nada para asustarnos en vano, por eso no insistí en que hablara, él tiene sus razones. Se sentó contigo en el piano y tocaron juntos una canción de cuna, la cual fue la primera que él aprendió a tocar (gracias a ti).

Sí, sé que es confuso hablar del doctor Quiroga y de Emilio como si no fuesen la misma persona. Es algo a lo que me acostumbré hace muchísimo tiempo. Hay que saber dividir entre la vida profesional y la personal, aun cuando esa línea puede ser muy frágil. Esta decisión la tomamos para evitar perturbar nuestras salidas hablando de tu salud en términos médicos; no sé si me sé explicar. Quería comentártelo para que no te confundieras mucho si hablaba del doctor Quiroga y luego de Emilio, para volver con el doctor.

Te amo, Julia.

Con amor,

Isabel