Capítulo 90

163 10 0
                                    

Narrado desde el punto de vista de Rubius.

_________

Mangel se pegó a mí y rápidamente se quedó dormido, yo no pude evitar quedarme despierto y darle vueltas al tema. Los brazos de Mangel pasaron por encima de mí para cogerme como un oso, joder, que agradable era el cabrón. Intenté quedarme dormido cerrando los ojos, pero estaba claro que no podía, así que me di la vuelta despacio para quedarme de frente con Mangel. Él estaba totalmente dormido, ¿cómo lo hacía? No podía evitar quedarme mirando sus labios igual que al principio de toda esta historia. Estaba claro que las dudas que había tenido por la tarde eran estúpidas, estaba agilipollado mirándole, y lo estaría para siempre.

Le di un pequeño beso para después pegarme un poco más a él e intentar quedarme dormido y supongo que lo hice, porque cuando abrí los ojos ya era de día. Mangel estaba aún a mi lado, aunque estaba despierto mirándome.

-Bueno' díah.

-Buenos días... -dije desperezándome.

-¿Has dormio bien?

-Sí... o eso creo –me reí un poco nervioso.

Mangel se levantó de la cama y se empezó a vestir. Decidí mirar para otro lado, el tema de que el padre me hablase así ayer y demás aún me intimidaba, y no era capaz de mirar a Mangel cambiarse por estar en la aquella casa. Así que decidí vestirme yo también e intentar pasar un poco del tema.

Cuando terminé Mangel estaba saliendo de la habitación, supongo que iría a desayunar, así que terminé de ponerme los zapatos mientras caminaba hacia él para seguirlo de una manera bastante torpe y que casi me hace caer al suelo. Terminé bajando con él y estaban todos desayunando en la mesa. Mangel se sentó y me senté a su lado, por suerte el padre estaba en la otra punta, aunque no se dignó a levantar la cabeza y mirarnos, la madre y la hermana en cambio nos dijeron buenos días. La madre me daba de todo para comer, diciendo que Mangel había dicho que desayunaba mucho, que gracioso el hijo de puta...

-No, no se preocupe... -le dije.

-Tutéame, por dios –se rió.

La hermana también me pasó algunas cosas para desayunar hasta que el padre levantándose de la mesa haciendo mucho ruido cortó el buen ambiente que había. Salió de la habitación y me quedé sin saber qué hacer.

-No os preocupéis por él –dijo la madre.

Ella se levantó y se fue con él, nosotros tres seguimos desayunando, aunque la verdad, se me había ido un poco el hambre. Mangel se levantó y se fue de la habitación, así que me quedé a solas con la hermana, estaba incómodo igualmente.

-Deberías comer algo –me dijo.

-Eh... no te preocupes.

-Me preocupo porque eres la pareja de mi hermano –se quedó mirándome.

Y tenía razón, era la pareja de Mangel, ¿qué estaba haciendo huyendo de lo que sentía? Decidí levantarme e ir a la habitación de la que salía algún vozarrón de Mangel, cuando entré se quedaron en silencio, durante un momento estuve nervioso porque todos se quedaron mirándome, pero... ¿Qué iba a hacer sino?

-Mire... -dije acercándome al padre de Mangel- no pretendo que lo entienda de primeras, no pretendo que se le meta en la cabeza la idea de que su hijo haya terminado dándose cuenta de que... -le miré- está enamorado de mí –y volví a mirar al padre- para mí fue igual de extraño, no entendía lo que pasaba, pero estoy seguro de quererle y a menos de que Mangel me lo pida, seguiré a su lado pase lo que pase.

Me acerqué a Mangel y me quedé a su lado.

-A menos de que él me lo pida no lo dejaré –miré a Mangel a los ojos- nunca.

--

Este Capítulo fue publicado el 15/04/13 en http://mangelandrubiusislove.tumblr.com/

Mangel & Rubius Is Love [Primera Temporada] [Capítulos 0 a 198]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora