- No me convencen los globos, parece fiesta infantil - dice Fer.
Joshua se queda quieto a medio camino de colgar otro globo del techo. - ¿En serio, Fernanda? - se da vuelta sobre la silla en la que está parado y la mira indignado. - ¿No me lo pudiste decir antes de la media hora que llevo aquí arriba colgándolos? - le reclama.
- O antes de la otra media hora que estuvimos inflando globos - le recrimino yo a la vez.
- O antes de comprarlos - agrega Joaco, quien está arriba de una mesa colgando el letrero de feliz cumpleaños que entre él y Fer pintaron.
- No lo había pensado - responde simplemente mi amiga. - Pero ya, déjalos, al menos los compramos azules y dorados, así que se ven medio elegantes - añade.
- Se ven bonitos - opina Joaquín, que ya terminó de acomodar el cartel. Me hace una seña para que lo ayude a bajarse de la mesa. Le doy la mano y salta hacia el piso. Pierde un poco el equilibrio al caer, y evito que se caiga colocando brevemente mi mano en su cintura. - Gracias - me dice con una pequeña sonrisa. Le sonrío de vuelta y lo suelto, un poco nervioso. Ambos nos sentamos sobre la mesa.
- Yo opino que nos quedó chingona la decoración - dice Josh mientras se baja de la silla y mira a su alrededor. - Parece una combinación entre fiesta infantil, quince años y reunión de señoras - agrega.
- Eso suena adecuado para Chava - les digo, haciéndolos reír a todos.
- ¿Nos falta algo más? - pregunta Joaco.
- Comer - responde Fer. - Ya debería haber llegado nuestra pizza. - Justo en ese momento tocan la puerta. - A huevo, los invoqué - dice mi amiga y va rápidamente a abrir, no sin antes pedirnos que le demos dinero para pagar.
Regresa con dos cajas de pizza y una más pequeña con papas, las deja en la mesa del centro y todos nos acercamos a comer.
Son alrededor de las cinco de la tarde y ya hoy es el cumpleaños de nuestro amigo. En cuanto salimos de la escuela nos vinimos para acá para decorar el salón. Chava se fue a su casa, a comer con su familia, y lo que él cree es que más tarde iremos al cine.
- ¿A qué hora te iras por nuestro mesías? - pregunta Fer mientras comemos.
- Poquito antes de las seis y media - responde Josh cuando termina de masticar su bocado de pizza. - A las siete va a llegar todo mundo, ¿no?
- Se supone, a esa hora les dijimos que llegaran - le digo mientras tomo una papa.
- Pues espero que ya este la mayoría cuando regresemos - comenta Josh.
- ¿Cómo lo convenciste de pasar tú por él en lugar de que se fuera en su coche "al cine"? - le cuestiona Joaco a Josh haciendo el gesto de comillas con sus manos.
- Ah, cierto, no les conté eso - contesta él. - Le dije que después del cine me lo iba a llevar a un bar y lo iba a dejar ponerse hasta la madre, así que no iba a poder manejar. Y aproveché mi mentira para convencerlo de que pidiera permiso de quedarse a dormir acá - nos cuenta. Joshua cumplió la mayoría de edad desde finales del año pasado, así que es lógico que Chava le creyera que lo llevaría a un bar.
- Bueno, lo de que lo vamos a dejar ponerse hasta la madre no es mentira - dice Fer. - Duda existencial, Josh, ¿tu mamá sabe que va a haber alcohol en la fiesta?
- Obviamente sabe - responde él. - Y por eso me hizo prometer ser el adulto responsable que casi no va a tomar y que se va a encargar de que todos los que vengan se vayan con cuidado a sus casas y lleguen sanos y salvos - agrega.
- Nos dijeron que sí como treinta personas, más ve tú a saber cuántos colados, ¿y tú los piensas cuidar a todos? - vuelve a preguntar mi amiga.
- No mames, tampoco tengo alcohol para que se pongan hasta la madre tantas personas, la mayoría van a estar lo suficientemente sobrios para poderse cuidar solitos - dice Josh riéndose. - Hablando de alcohol, tengo que ponerle ron al agua de horchata y a la de mango - se pone de pie y avanza hacia la mesa donde están un par de vitroleros con agua fresca.
ESTÁS LEYENDO
Posdata [Emiliaco]
RomanceEmilio es un joven de diecisiete años, que está cursando su último semestre de preparatoria mientras se prepara para entrar a la universidad y estudiar lo que le ha apasionado toda la vida: historia. Todo parece bastante simple en su vida, hasta que...