Type and imaginas.

Short: Timothy Innes

Baje del coche y mire hacia la ventana de mi apartamento.
Luz. Timothy estaba en casa. Genial.
Subí por las escaleras.
Estaba agotada. Había tenido turno de noche en el hospital. Timothy había salido a celebrar con sus compañeros de la serie que habían terminado ayer por la mañana, y por la noche cuando me iba a trabajar aún no había tenido noticias de él. Lo había llamado varias veces y no me había cogido el teléfono, había dejado mensajes y no los había contestado... Llegué a pensar que le podría haber pasado algo.
Abrí la puerta y los encontré en mi salón con la mesa llena de cervezas.
-Helen! Has vuelto! Que tal la noche?-Timothy se levantó y vino a darme un beso.
Levante la mano entre nosotros para que no se acercara. Apestaba a alcohol.
-Por lo visto no tan bien como tú. Me voy a dormir, no hagáis ruido.
-Helen? Ey, que pasa? Espera!
Me intento coger de la mano, pero no le deje. Estaba muy enfadada.
-Que que pasa? Ni un triste mensaje, Timothy. No sé nada de ti desde ayer. Eso pasa. Me voy a dormir.
Me metí en la habitación y cerré con fuerza, dejando clara mi opinión. Me di una ducha y me metí en la cama rápido.
Tim nunca había hecho algo así. Nunca había sentido tal enfado con él, nunca me había dado motivos. Ahora lo escuchaba despedirse de sus amigos.
Me dormí enseguida, pudiendo el cansancio conmigo.
Cuando desperté era casi la hora de comer, por lo que salí.
El salón y y la cocina estaban perfectamente limpios, como si no hubiera habido nadie aquí. Pero Timothy no estaba.
-Tim? - llamé en voz alta inútilmente. El apartamento era pequeño.
Me serví un vaso de agua.
Y si se ha ido?
Seguía enfadada, pero ahora estaba algo asustada.
Escuche la puerta abrirse y salí al salón.
Tim entraba con unas bolsas.
-Helen. Em. He traído la comida.
Oh cielos, menos mal.
Podía ser idiota, pero era mi novio y lo quería.
Asentí.
Entró a la cocina y la dejó en la mesa, girandose después despacio para mirarme.
-Mira... Lo siento.
-Imagino.
Me cruce de brazos, dejándome caer contra el frigorífico.
-No me acordé y después me quedé sin batería.
-Ya. Pues yo llegué a pensar que podría haberte pasado algo, sabes? Estuve muy preocupada. Dijiste que vendrías por la tarde y cuando me iba a trabajar todavía no había tenido noticia, Tim. Entiendo que estuvieras pasándotelo bien, y que fue un día importante para ti. Pero joder, soy tu novia, tengo derecho a saber como estás. Ni siquiera quería saber que estabas haciendo o donde estabas. Quería saber que te lo estabas pasando bien, que estabas bien! Solo un mensaje!
-No tenida batería!
-Sabes mi número, Tim! Podrías haberle pedido el móvil prestado a Millie, o a Mark! A quien sea, me da igual!
Tim se apoyó sobre una silla.
-Lo siento, vale? Tienes razón.
Suspiré.
Sentía ganas de llorar, pero era demasiado orgullosa para hacerlo.
-Parezco una novia de esas tóxicas que salen por la tele. - dije mirándome los pies.
-Eh, no. Es normal preocuparse.
Dio un par de pasos hacia mi.
Levané la vista.
-Tienes razón, Helen. Lo siento.
Asentí.
-Quieres un abrazo?
-Por favor.
Tim me separó del frigorífico y me abrazo con cuidado, acariciando mi pelo despacio.
-No lo vuelvas a hacer, por favor. Me preocupe mucho.
-Tranquila.
Me dio un beso en la cabeza.
-He traído comida, para reconciliarnos.
-Nunca me había enfadado así contigo. - dije abrazando lo más fuerte.
-Intentaré no hacerlo más.
Me dio un beso en la mejilla.
-Te quiero, Helen.
-Y yo a ti, Timmy.
Me dio un pequeño beso en el los labios.
-Vamos a comer.