Type and imaginas.

Short: Mark Rowley.

Deje las llaves en el mueble de la entrada y el bolso en el sofá.
-He llegado.
La luz de la cocina estaba encendida.
-Mark?
-Aquí!
Entre. Estaba atareado haciendo la cena, y por el olor supe que eran sus espaguetis.
Cogí una botella de agua del frigorífico y la abrí.
-Que tal el día? - pregunto.
-Bien. Ha sido movido, pero es bueno.
Cerré el frío rifico y bebí mientras me giraba. Cuando lo vi el agua casi se me sale por la nariz.
-Madre mía, Mark!
-Que?
-Como que que? Tu cara! Tú! Madre mía, Mark.
-Que? No te gusta? Mierda, te tendría que haber avisado y...
-Eh, eh.
Cruce los dos pasos que nos separaban y deje mis manos caer en su pecho.
-No! Mark, no. Es que... No me esperaba. Esta mañana tenías esa barba y ahora... - lleve mis manos a sus mejillas.
Mark se había afeitado la barba después de meses y había sido un shock.
-Se que es muy brusco, pero quería cambiar un poco.
Sonreí acariciando sus mejillas suaves con mis pulgares.
-Pareces... Pareces otro...-dije boquiabierta.
Adoraba el Mark con barba. Era una de las cosas que más me había impresionado cuando lo había conocido. Aquella apariencia que le daba de tipo duro y serio me gustaba. Pero el Mark sin barba parecía mucho más dulce, más... Tierno.
-Bueno, volverá a crecer, no te preocupes. - vi como parecía algo triste. O decepcionado.
-Mark, que pasa?
-No te gusta. Mi cara. Me prefieres con barba. Es normal. Va a crecer otra vez.
-Callate, tonto. - dije juntando nuestros labios.
Mark me abrazo por la cintura y me devolvió el beso.
Me separe y lo mire bien.
-Que raro. Es... No me arañas con la barba. - dije riendo mientras le daba otro beso.
Sonreí sobre sus labios.
Sujetandolo por la nuca profundice el beso. Adoraba poder sentir su piel bajo mis manos.
Mark deslizó la lengua entre mis labios mientras me pegaba más a su cuerpo. Sus manos me agarraba por la cintura.
Se separó.
-Estas muy guapo, Mark. - dije sonriendo.
-Si?
-Claro que si. Sigues siendo mi Mark pero con cara de adolescente.
Soltó una carcajada.
Le di otro beso en los labios y después en la mejilla.
-Que suave. - dije riendo sobre su piel mientras seguía dando besos.
Mark me levantó del suelo y me sentó en la mesa.
-Entonces te gusta?
-Claro que si, Mark. - dije mirando sus ojos marrones. - Eres guapísimo.
Acaricié su pelo alborotado.
Mark me dio un beso en los labios y otro en la mejilla mientras iba hacia mi cuello.
-Mark, espera. Quiero decirte una cosa.
Se separó frunciendo el ceño.
-A ti te gustas así?
-No entiendo.
-Quiero decir, si te has quitado la barba es porque te ha apetecido, has pensado que era un abuena idea y querías hacerlo, no?
-Si, claro.
-Entonces no dejes que te influya lo que piensan los demás.
-Cariño...
-No, en serio, Mark. Se que soy importante para ti y siempre tienes muy en cuenta mi opinión. Pero si quieres hacer algo, vestir de determinada forma, lo que sea. Hazlo. Si te hace feliz, hazlo.
Me acarició la cara con ambas manos.
-Te quiero, lo sabes?
-Claro que lo sé, Mark.
Me abrazo, escondiéndose en mi cuello.
-Yo también te quiero, Mark. - le di un beso en el hombro. -Quiero que seas tú, tu mejor versión, vale?
Me dio un largo y apasionado beso.
Cuando nos separamos, vi sus ojos brillar con malicia.
-Entonces... Quieres probar?
-Probar?
Se dejó caer de rodillas al suelo y separó mis piernas, subiendo mis manos por ellas hasta colgarlas debajo de mi falda.
-Oh. Em. Claro. Adelante. - dije ganandome una carcajada.
El Mark con barba era genial, pero el Mark sin barba no se quedaba corto.