Jake Kiszka

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-Los gemelos están deseando verte. - Dijo Sammy parando en la puerta de la casa de los Kiszka.
-Yo también estoy deseando verlos.
Nos bajamos del coche y abrió la puerta.
Enseguida el de pelo rizado me había levantado del suelo y me daba vueltas en el aire.
Reí y alborote su pelo cuando me bajo.
-Me gustan tus rizos, Joshi.
-No me llames así.
-Lo siento, Joshi.
-Wow, y yo? - Jake abrió los brazos.
-No te pongas celoso, tonto.
Me abrace a él. Suspire y sonreí contra su cuello.
Me aparte y cogí su cara con mis manos.
-Tu pelo también me gusta, Jakey.
Sonrió.
-Y Daniel? Va a venir? - me giré.
-Si. No tardará.
-Vamos fuera, tienes mucho que contarnos.  Que tal te han tratado los franceses?
-No me puedo quejar.
-Vienes el sábado a Detroit, no?
-Por supuesto.

Ahí estaba. A un lado del escenario, boquiabierta y acalorada.
Mis ojos no se despegaba de Jake.
Tocaba con tanta pasión...
Joder... Era asombroso.
Su chaqueta abierta dejando ver su torso y abdomen. Sus vaqueros apretados. El pelo cayendo a los lados de su cara.
La música acabó y las luces se apagaron.
Los vi salir del escenario.
-Que te ha parecido? - preguntó Danny.
-Sois alucinantes.
Los felicite a todos.
Jake quedó el último.
-Te ha gustado entonces?
-Claro que si, Jakey.
Arregle su chaqueta, negra con flecos dorados. Después coloque bien el collar.
-Estoy sudado... - Dijo sujetando mis manos.
Y? Yo solo necesitaba una escusa.
-No importa.
Discretamente acaricié su pecho.
-Em. Vamos? Quiero una cerveza.
-Esa es mi chica.
Su chica.
Fuimos hasta una sala en la que había un cartel de Greta Van Fleet.
Los chicos estaban dentro riendo y haciendo el tonto.
-Necesito una toalla.
Casi se me cae la baba al ver a Jake quitarse la chaqueta.
Suspire y mire hacia otro lado.
-Limpiate un poco. - Josh me tocó la barbilla.
-De que hablas?
-Lo sabes bien.
Rodé los ojos y bebí de mi cerveza.
-Sois raros vosotros dos.
-Dice él con plumas colgando de su pelo. - me burle.
-No me refiero a eso. Me refiero a que os gustáis y todo eso. Y no hacéis nada. Miralo ahí viene, todo guapetón y sudado.
-Josh eres un jodido idiota. -Soltó una carcajada.
-No la molestes más, Josh.
-No estaba molestando.
-Lo estabas haciendo. - afirme yo.
Me dejé caer en un sofá y Jake se sentó a mi lado.
-Cuando vuelves a Francia? - preguntó.
-No vuelvo.
Intento esconder una sonrisa.
-Por qué? Ha pasado algo?
Negué.
-Lo único es que allí no tengo nada. He hecho buenos amigos, pero mi verdadera familia está aquí.
Mi mano cayó en su antebrazo.
Jake parecía no saber que decir o que hacer. Solo sonreía.
-Me alegro que que vuelvas. No es lo mismo sin ti.
-Oh vamos, eres una estrella del rock, te pasas la vida viajando. Dudo mucho que te acuerdes de mi.
-Claro que me acuerdo de ti. Y no es lo mismo volver a Frankenmuth a ver a la familia y que tu no estés. A parte, mientras no tengas trabajo puedes venir con nosotros a todas partes.
-Como una kanguro?
-Algo así.
Reí.
-No se si podría soportarlo.
-Tampoco es para tanto.
-Ah no? - Señale a Sam y Josh, quien estaban haciendo vete a saber que mientras que Danny reía.
-Bueno, yo me portaría bien. - Dijo con cara de cachorrito.
Reí aún más
-Eres un chico bueno.
-No creo.
Sus pupilas se agrandaron y mi respiración se aceleró.
-Em... De verdad, me gustaría mucho que vinieras.
-Vale.
-Si?
-Claro.
Sonriendo se inclinó y junto nuestros labios. Un beso corto, pero dulce.
Al apartarnos, baje la vista a mi mano, aun en su brazo acariciando la cicatriz de este.
Este tipo de cosas eran normales entre nosotros. Besos. Caricias. Sexo de vez en cuando.
Jake había sido el primero con el que me había acostado. Mi primer beso. Y aparte, siempre estaba ahí. Daba igual lo que hubiera pasado.
-Eres preciosa.
-Para... - susurre avergonzada.
-No quiero.
Le empuje.
-Quieres que vayamos a otra parte? - dijo de repente en voz baja.
-Claro.
Discretamente, Jake y yo salimos de la habitación.
-Podemos ir al autobús, si quieres, esta aparcado en la parte de atrás.
-Te has dejado la chaqueta.
-No pasa nada. Toda la ropa está ahí.
El guitarrista abrió la puerta del autobús.
En  momento en el que la cerro sujete sus mejillas y lo bese.
-Abbey. - me sujeto por los hombros y me separó un poco.
La había cagado?
-Que?
-Te quiero.
-Jake... Yo... Yo también te quiero.
-Eso esta muy bien.
Reí y lo bese de nuevo.
Está vez se dejó llevar.
Caímos en el sofá al final del autobús, su cuerpo sobre el mío.
-Espera, espera.
Se arrodilló entre mis piernas y acaricio mis rodillas.
-Que pasa?
Acaricie su abdomen.
-Nada. Solo es que no quiero que esto sea algo de una noche. Sabes?
-Ha habido otras noches Jake.
-No me refiero a eso. Te quiero de verdad, muchísimo.
Bese su pecho.
-Yo también te quiero muchísimo, Jakey.
-Entonces... Eres mi novia ahora?
-Si.
Jake escondió su cara en mi cuelo, dejando besos y mordiscos por todas partes.
-Siempre has sido mi gemelo favorito. - susurre en su oído haciendo que riera.
Jake levantó mi falda de flores, que el mismo me había regalado hace años y apartó mi ropa interior.
Me acaricio con sus dedos, haciendo que me diera un escalofrío.
-Quieres que siga?
-Claro que si, idiota.
Me besó con fuerza, su lengua en mi boca.
Y la puerta se abrió. Jake gruñó y miró a sus hermanos y a Danny.
-Wow. Creo que interrumpimos.
Me senté en el sofá acomodando mi ropa.
-No, chicos, no importa.
-Si que importa! - se quejo el guitarrista.
Los otros tres se acomodaron en el sofá de enfrente.
-Entonces que? - dijo Danny.
-Que de que?
-Oh vamos, acaso eres un vampiro? Has visto como tiene el cuello? - dijo Josh exageradamente.
Me puse roja, arreglando mi pelo.
-Idiota. - Escuche a Jake murmurar.
-Somos cuñados? - sugirió Sam.
-Sip.
Todos sonrieron y nos felicitaron. Jake me abrazo por los hombros. Me apoye en su pecho.
-Te has quedado al gemelo feo. - Dijo Josh después de un rato de conversaciones estupidas.
-Si? Yo creo que me he quedado al gemelo sexy. - Dije acariciando el abdomen de Jake.
Todos rieron.
Jake se inclinó y junto nuestros labios.
-Me gusta que pienses eso.

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