Capítulo XXXII: En la palma de mi mano

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- Muchas felicidades – dijo Tony algo incómodo.

- Gracias Tony – le respondí de la misma forma, nos quedamos en silencio.

- Quería decir lo siento – dijimos los dos, mi papá me sonrió.

- Yo soy el que debe decir lo siento – dijo – tienes razón, desde que tu mamá murió no hemos sido una familia y fue mi culpa, no debí alejar a mi princesita – dijo acariciando mi rostro paternalmente – debí decirte lo de Pepper, temía que reaccionarás mal.

- De hecho, lo hice.

- Pero creo que hubiera sido diferente si lo hubiéramos conversado como dos personas adultas, ya estás por cumplir 21 – sonrió – mi pequeña dejará de ser una niñita y será toda una mujercita – me abrazó, correspondí a su abrazo – no sabes lo orgulloso que estoy de ti, encima con las mejores notas de toda tu generación.

- Bueno por ahí dijeron que era porque soy una Stark.

- Y lo eres, mi princesa – dijo feliz – jamás dejarás de serlo, ni cuando te cases – reí – pero aún falta mucho, por lo menos 30 años.

- Tranquilo, no pienso en casarme – sonrió.

- Por eso, eres mi princesa, lo que me lleva a – dijo viendo a todos lados – ¡Parker! – gritó, Peter puso cara de susto, papá caminó hacia él.

- Mejor vayamos por Tony – me dijo Pepper – y muchas felicidades.

- Gracias, Pepper y perdón – la abracé – tú también has estado siempre para mí.

- No te preocupes, linda, todo siempre estará bien entre nosotras.

- Perdón – dijo Steve – creo que deberíamos ir donde Tony y Pepper – dijo señalándolos.

- Ay no, yo me encargo – dijo Pepper – ¡Tony! – gritó para ir hacia donde papá junto a Happy.

- Tony no puede dejar ser Tony – me dijo Steve, reí – te dije que no estaban molestos.

- Debí escucharte, creo que a veces, solo a veces, debería escuchar a alguien más que no sea yo – rio – gracias Steve.

- De nada, jolie, por cierto, antes de que me olvide – buscaba algo en su blazer – feliz graduación, jolie – me dijo extendiéndome una pequeña caja de Laudreé, sonreí al abrirla.

-        De nada, jolie, por cierto, antes de que me olvide – buscaba algo en su blazer – feliz graduación, jolie – me dijo extendiéndome una pequeña caja de Laudreé, sonreí al abrirla

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- Me encanta, siempre tenía la intención de comprar uno, pero lo olvidaba – dije sonriéndole – pensé que no eras bueno regalando cosas.

- Lo sé, creo que solo tuve suerte, además, ninguno es de frambuesas – me sentí escuchada.

- No lo olvidaste y eso que solo te lo dije una vez.

- Jamás me olvidaría algo que sea sobre ti – saqué uno de los macarons y se lo extendí, lo comió.

Feelings (Steve Rogers y tú) (Steve Rogers & tú)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora