Capítulo XXXVI: Frívola

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- Hey, jolie, mira quién vino – dijo entrando Steve a mi habitación junto a Nat – a verte – dijo sorprendido al verme aún en mi cama en mi bata con un martini en la mano, mis lentes de sol, varias cajas de pañuelos tisú, una enorme caja de macarons, tenía la TV encendida con la película "El diario de Noah" y a Madilyn Bailey cantando "traitor" a un extremo de mi habitación, Nat rio suavemente.

- Perdón, es que se supone que estás en depresión, pero esto es demasiado – bebí un sorbo de mi martini – ¿quién es ella?

- Madilyn Bailey – contesté, la canción terminó – otra vez, pero más triste, como yo – le dije, Nat sonrió – le dije a Olivia que venga, pero me dijo estoy de gira y yo le dije, pero realmente necesito tu canción ahora, ella me dijo perdón, así que le dije que le contaría mi historia de desamor a Taylor Swift para que escriba una canción y gané un Grammy y ella no.

- No entendí ni una palabra – dijo Steve – pero tienes que salir de aquí, llevas un día entero aquí, no contestas las llamadas de Tony, no le hemos dicho nada, no vine a verte porque pensé que necesitabas tu espacio – alcé la mano, la película estaba en la parte donde Noah le pedía a Ali que se quede con él y que trabajaran juntos para salir adelante.

- ¡Mentiroso! – grité lanzándole la caja de pañuelos tisú a la pantalla de la TV.

- Sí, estás muy mal, linda – dijo Nat, vio a Madi – puedes irte, linda, nosotros nos encargamos.

- De acuerdo, te veo luego, ___ – me dijo – soy su fan – dijo viendo a Nat y Steve – se fue.

- Estoy viendo – dije cuando Nat apagó la TV.

- ¿En serio te quedarás ahí? Eres ___ Stark, la chica de los clutch y tacones que no se da por vencida, que no se deprimirá porque alguien no supo valorarla – dijo Nat tratando de animarme.

- No, hoy quiero ser ___ Stark, la chica que se queda abrazando a Joshep de peluche – dije abrazándolo, Steve se acercó a mí.

- ¿No prefieres salir de esa cama y hablar con alguien? – me dijo.

- Alguien quien me entienda – asintió – un profesional que me haga sentir mejor – volvió a asentir sonriendo – necesito ir a hacerme la manicure – se le borró la sonrisa.

- No, jolie, me refería a un terapeuta, pero ¿por qué manicure?

- Porque ellas te escuchan, además que Peter me haya engañado no va a hacer que me vuelva loca.

- Entonces, vamos – dijo extendiéndome la mano – yo te invito la manicure – vio a Nat – y a ti, también – me paré de la cama tomando su mano.

- Gracias, Capi Guapo – dije feliz y me metí a cambiar. Fui a hacerme la manicure con Nat, Steve nos acompañó, al parecer su disfraz seguía siendo infalible, luego fuimos a comer hamburguesas, la pedí con muchas trufas, hasta que volvimos a mi apartamento, Nat accedió a ver una película con nosotros, era lindo tener amigos que se preocupen por ti. Y así pasó una semana, Peter ni siquiera se había atrevido a buscarme para tratar de darme una explicación, aquello solo me hacía pensar que él nunca estuvo enamorado de mí como decía, Nat y Steve solían venir a verme, estábamos viendo una película mientras comíamos pizza hasta que oí el sonido de un golpe en mi terraza, era Peter, Nat caminó hacia él.

- Nat, no – dijo Steve tomándola de la cintura.

- Solo dame 5 minutos con él – dijo.

Feelings (Steve Rogers y tú) (Steve Rogers & tú)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora