Xiao
22 de Marzo – 16:21 PM
Liyue – Hotel Goztamiel – Habitación Nathaniel y Xiao
En el fragor del acto, llevé más allá del límite a su cuerpo. Lo devoré... demasiado. "¿Por qué pierdo tanto el control contigo?", me preguntaba, mientras contemplaba el rostro del hombre del que me había enamorado.
Después de comer, hice que apoyara su cabeza en mi regazo, para que descansara por un momento. Me sentía horriblemente culpable.
Sabía que tendríamos una actividad más aquella tarde y, por mucho que él dijera que ya estaba bien, yo era consciente de que aún le dolían las caderas inmensamente.
Fui acariciando su cabeza, provocándole al fin a su cuerpo algo de aquella tranquilidad que yo le había arrebatado a duras embestidas horas antes.
Conseguí que se durmiera y... conseguí que apareciera "él".
-Copia de Nathaniel: me buscabas, ¿verdad? –sonreía, en aquella aura siniestra que lo caracterizaba-. Sabes bien que, si se trata de ti, él es fácil de manipular, ¿eh? –alzó una ceja.
-Xiao: ¿tratas de sermonearme? –recriminé-. Eres tú quien más ha explotado su debilidad.
Se encogió de hombros. Evidentemente, no le importaba en absoluto lo que había dicho.
-Copia de Nathaniel: ¿qué demonios quieres? –fue directo.
***
Xiao
22 de Marzo – 17:05 PM
Liyue – Hotel Goztamiel
Rió ante mi proposición, pero la aceptó. "Si voy a relacionarme contigo, me encargaré de que lo sufras como mereces. ¿Estás seguro?", su sonrisa expresaba una malicia patente. Y, sin embargo, yo también acepté.
Sí, era peligroso y quizá una locura. No obstante, aquella feria también lo podía ser para Nathaniel. Si darle latigazos o realizar actividades similares (o peores), iba a ser necesario para conseguir aquello... prefería coger las lentillas que siempre guardaba por si acaso y hacerlo con su dragón.
Al fin y al cabo, dudaba de que nos "perdonaran" saltarnos los requisitos por segunda vez.
-Trabajador: ¡bienvenidos a una nueva fantasía llena de gozo! –preguntó, delante de una estancia como la que ya habíamos estado pero con otro mobiliario-. ¿Quién será el sanador y quién el paciente?
"Oh...", se me hizo extraño que fuéramos a experimentar una "fantasía" que no estaba muy alejada de los roles que habíamos ejercido Nathaniel y yo al comienzo. El destino... debía ser caprichoso.
El pelirrubio tomó, en el acto, la bata que había preparada sobre una bandeja.
-Copia de Nathaniel: yo seré el sanador –volvió a reír.
Contuve el escalofrío.
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El Pecado del Alquimista 11 [+18] (Genshin Impact)
Fiksi PenggemarUndécima parte de El Pecado del Alquimista. Secretos que retumban en las almas.