El Pecado del Alquimista 11 [+18] (Genshin Impact)

Capítulo 66

Kokomi

24 de Marzo – 3:29 AM

Liyue – Mansión Brillo Nocturno – Aposentos del Dragón

Cuando vinieron los gladiadores y abrieron la puerta, tuvieron que agarrar, entre varios, al salvaje y borde joven. No sabía qué relación habían tenido entre ambos, pero la furia que expresaba hacia Albedo le estaba cegando el sentido del miedo y, sobre todo, el sentido común.

Incluso él era consciente de que no podría hacer nada contra aquellos poderosos hombres, pero seguía rebelándose sobre el colchón.

-Xiao: ¡¿disfrutaste cuando lo firmaste, verdad?! –gritó de pronto, con una ingente rabia, mientras lo agarraban de piernas y brazos.

En algún momento, también lo habían tenido que tirar de la tela que tenía en la espalda. Pese a ello, continuaba removiéndose.

-Albedo: ... -con aquel mecanismo en su nuca, era imperturbable. El odio que le estaba lanzando el peliverde le era indiferente en aquel momento. Sólo esperaba la nueva orden, puesto que le había pedido que se quedara quieto frente a la cama mientras lo doblegaban.

-Gladiador 1: ¡¿estás loco o qué?! ¡Conoce tu maldito lugar, sometido! –le gritaban también, aunque sin mucho éxito-. ¡O acabarás sin huesos en los brazos y en las piernas!

-Gladiador 2: es escurridizo el muy...

Pero seguía sin escucharles y dirigiéndose al dragón.

-Xiao: ¡¿lo sabe Aria?! –rugía, siendo tirado por todas partes para que se quedara quieto sobre la cama-. ¡¿Sabe Aria que tú firmaste nuestro divorcio?!

Entonces, todos nos quedamos en silencio, puesto que el dragón mostró al fin una expresión en su impávido rostro.

Sus ojos azules se abrieron como platos y temblaron ante la súbita noticia.

-Albedo: ¿qué estás...? –su temblor fue extendiéndose por el resto de su cuerpo.

Ante aquella reacción, el peliverde paró de forcejear por un momento.

-Xiao: ¿ni siquiera tú eras consciente...? –musitó.

Se dio un ambiente extraño, un silencio más que, salvo a ellos dos, nos confundió a todos los presentes.

Una lágrima se resbaló por la mejilla del dragón. Y, en el acto, sufrió una sacudida eléctrica del artefacto que llevaba encima.

-Albedo: ¡AAAAH! –gritó de dolor, y cayó de rodillas.

El artefacto debió percibir un rayo de lucidez que debía hacer desaparecer. Y, de hecho, tras varias descargas eléctricas, así lo hizo.

De nuevo regresó la no expresión a su rostro.

***

Xiao

24 de Marzo – 3:34 AM

Liyue – Mansión Brillo Nocturno – Aposentos del Dragón

"Fue su dragón...", comprendí al instante. Al final, incluso Albedo, quien se suponía que era el más racional, debió enloquecer con aquella situación pasada. Era un círculo vicioso en el que los tres nos estábamos dañando entre sí. Los momentos de felicidad eran meros descansos temporales en la tormenta.

Y, por mucho que doliera, fue precisamente su dragón quien rompió al fin con aquel círculo vicioso.

Amé a Aria, pero lo que sentía ahora por Nathaniel estaba a otro nivel.

Cuando conocí la noticia, intenté mantenerme fuerte ante Kairi para que pudiera salir adelante, pero ver la cara de Albedo me hizo flaquear.

Era el momento de que todos dejáramos atrás el pasado. Nathaniel me había dado fuerzas para hacerlo, así que lucharía por ello.

-Gladiador 1: menos mal que has parado a tiempo, ¡ya iba a romperte algo para que aprendieras! –rió.

Aunque, antes de pensar siquiera en tener un futuro, debíamos solucionar aquel horrible presente.

Cuando aflojaron su fuerza sobre mi cuerpo, aproveché y... le corté el cuello a uno con la lanza.