Capítulo 30

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Aoi

22 de Marzo – 17:41 PM

Liyue – Hotel Goztamiel – Habitación de Sasha

Si quería mantener el trabajo, debía hacerlo bien para poder seguir en aquel hotel. No era una experta limpiadora, pero sabía cómo tener las cosas limpias. ¡Así que ahí estaba yo! Sacaba brillo a cada cosa que encontraba por el camino, fregaba el suelo, cambiaba las sábanas... y de vez en cuando me horrorizaba con alguna que otra cosa que encontraba en las habitaciones.

"Sin duda es esa clase de hotel", pensaba, mientras tiraba directamente a la basura aquellos desechos que ni comprendía qué eran. Por supuesto, ¡con guantes!

-Sasha: eres una trabajadora dedicada –comentó la mujer que me había ayudado antes a encontrar a Nathaniel, durante la limpieza de su habitación.

-Aoi: ¡muchas gracias! –sonreí y continué quitando el polvo por encima de los grandes cuadros.

Ellos habían terminado la segunda actividad de la feria pronto, así que su pareja y ella ya estaban libres.

"¿Cómo serán las actividades?", era imposible no tener curiosidad.

-Sasha: ¿no te preguntas qué se hace exactamente en la feria? –justamente me preguntó.

Yo me sonrojé.

-Aoi: emm... bueno... -me puse un poco nerviosa-. Emmm... -debía aceptarlo-. Sí, tengo mucha curiosidad –dije finalmente.

Ella rió.

-Sasha: tu amigo está aquí para llamar la atención de Ábaco de nuevo, ¿no?

"¿Cómo que "de nuevo"?", alcé una ceja, confusa. No obstante, vista la oportunidad de sacar más información de importancia para Nathaniel, fui directamente al grano.

-Aoi: ¿tú sabes cómo conseguirlo? –interrogué, sin poder contener la emoción. Realmente... quería ser de ayuda para el sanador-. Necesita un artefacto de Ábaco para salvar a su padre, así que... ¡de verdad te agradecería que me contaras algo!

Entonces, sonrió de forma distinta. Sonrió... victoriosa. Aunque no le di mucha importancia, ya que aguardaba su respuesta.

-Sasha: parece más que necesario que consigáis ese artefacto, ¿verdad?

Asentí fuerte con la cabeza.

-Sasha: ¡entonces, sin duda alguna, os ayudaré! –se levantó, animadamente, del sillón en el que se encontraba y fue hacia una mesilla de noche.

Sacó una pequeña botella y corrió a mi lado.

-Sasha: Ábaco ama este licor, ¡no sabes cuánto! –aseguró, también emocionada-. Si lo bebes, te dejará un aroma que lo atraerá en cuanto te vea. ¿Quieres probar?

Su novio se removió sobre el otro sillón de la estancia y escondió su rostro detrás de una revista que estaba leyendo.

-Aoi: mmm... -lo pensé, puesto que "algo" me decía que aquello era un poco sospechoso. Sin embargo, cuando imaginé la posibilidad de conseguir rápidamente por mí misma aquel artefacto, se me fueron las dudas-. ¡Claro!

Sirvió el contenido de la botella en un vaso y me lo ofreció.

El Pecado del Alquimista 11 [+18] (Genshin Impact)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora