El Pecado del Alquimista 11 [+18] (Genshin Impact)

Capítulo 80

Xiao

5 de Abril – 22:38 PM

Inazuma – Tenshukaku – Aposentos del Príncipe Heredero

"Puedo marcarte definitivamente, Xiao", se repetía aquella frase en mi mente una y otra vez. Si era cierto lo que decía, se abría un abanico de posibilidades más amplio que ni siquiera me había permitido imaginar.

¿Yo podría ser de Nathaniel por completo? ¿Me liberaría entonces de la marca de Aria?

Al mismo tiempo que yo me perdía en mis pensamientos (totalmente ensimismado), el pelirrubio me tumbaba y me abría las piernas delante de él.

Deslizó las manos por mis piernas, hacia abajo, hasta llegar a mi pene. Su mano derecha se apoderó de aquella torre, que se había endurecido aún más tras la noticia. La frotó, de arriba abajo, apretando sus dedos sobre la misma para que los sintiera intensamente.

Con la mano izquierda... fue más abajo. Sin que lo viera llegar, pues estaba embobado en fantasías y "padeciendo" el placer de los íntimos roces, fue insertando uno de sus dedos por mi recto.

-Xiao: ¡ah! –gemí, ante la sorpresiva penetración-. ¿Nat...? Digo... -suspiré-. ¿Alteza?

Poco a poco, fue removiendo el dedo en mi interior. Dentro, fuera, dentro, fuera... ¡Ah!

-Xiao: quítate esa maldita máscara –ordené, prácticamente, con una voz que no pude evitar que sonara excitada.

Fue tajante y escueto, como yo tantas veces lo había sido con él:

-Nathaniel: no.

-Xiao: ¡¡he dicho que te la quites!! –volví a ordenar, y esta vez intenté alcanzar su cara para agarrársela.

Esquivó mi mano, ladeando la cabeza hacia un lado. Y, como "castigo", insertó dos dedos más en mi interior.

-Xiao: hmmm... -contuve el alto gemido que iba a provocarme.

Intenté de nuevo quitársela, pero lo único que conseguí es que removiera con más fuerza sus dedos en mi interior.

-Nathaniel: a partir de ahora, llevaré esta máscara cuando hagam-

Movido por la frustración y la rabia por no poder pedirle directamente que me marcara, lo interrumpí:

-Xiao: ¡ni de broma! –repliqué, enfadado.

Y, con aquellas frías energías que ahora él debía mantener, dictaminó:

-Nathaniel: no te he dado opción, Xiao.

-Xiao: yo tampoco...