Capítulo 45

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Aria

23 de Marzo – 8:58 AM

Liyue - Cámara de Jade

Mientras me contemplaba, pude ver cómo sus ojos dorados se humedecían. Estaba rabioso, pero, sobre todo, inmensamente preocupado por mí. Sentía cómo sus, habitualmente firmes, manos; temblaban mientras me sostenía sobre él para que no yaciera en el suelo.

Antes sentía mucho dolor, creía desfallecer. No obstante, cuando escuché que amaba a Nathaniel, fui... tan feliz.

-Aria: me alegro tanto por mi pequeño... -yo no pude contener más las lágrimas-. Nathaniel te ama tanto...

Cerró los ojos, cogió fuerzas y los volvió a abrir.

-Xiao: no hables... no estás bien –rogó, retirándome parte del cabello que se había quedado pegado en el perfil de mi rostro por las salpicaduras de mi propia sangre-. Nada... bien... -tembló, y tuvo que volver a cerrar los ojos para contener sus intensas emociones-. Te sacaré de aquí –su voz comenzaba a quebrarse.

Negué la cabeza como pude.

-Aria: si intentamos salir de aquí, tendríamos que pelear contra Kairi –era consciente-, y ninguno de los dos quiere eso por nada en el mundo, ¿verdad?

-Xiao: ...

Ambos habíamos dejado de amarnos, pero nada cambiaría lo tan importantes que habíamos sido el uno para el otro.

No sabía si íbamos a tener otra ocasión, así que yo abrí mi corazón. Saqué lo que tanto quise transmitirle aquel tiempo:

-Aria: no me arrepiento de haberte conocido, de los años que disfrutamos y, sobre todo, de lo que creamos juntos –declaré, refiriéndome a nuestra hija-. Eres un hombre maravilloso al que hubiera perseguido eternamente si no hubiese estado ya enamorada de alguien más –continué, intentando mantener aquella sonrisa que se enturbiaba, en algún momento, por el escozor de los latigazos-. Sé que puedes hacer muy feliz a mi hijo, y te apoyaré si así pretendes hacerlo.

Una lágrima terminó escapándose de su control, resbalándose por su mejilla.

-Xiao: Aria, yo siento muchísimo lo que te... -quiso decir de pronto.

Volví a negar con la cabeza, con aún más voluntad.

-Aria: sólo dime que lucharás para que ambos seáis felices, es lo que más necesito escuchar de ti –aseguré, llevando una de mis manos a su mejilla para secarle aquella lágrima.

-Xiao: ... sí –respondió. Pese al melancólico ambiente por mis heridas, él también pudo sonreír-. Lucharé por él –pronunció de forma sentida, como si se liberara-. Y tú lucharás por Albedo cuando podamos salir de aquí.

Esta vez, asentí con la cabeza.

-Aria: así es –confirmé, preparada para poner el mundo patas arriba por amor si era necesario.

Decidí hace tiempo que no volvería a huir de lo que amaba. Y, por la mirada de Xiao, supe que él coincidía conmigo.

Sentí paz.

-Xiao: yo... tampoco me arrepiento –dijo de pronto-. Gracias por aquellos hermosos años, Aria. Gracias por traer a Kairi a este mundo. Aunque ahora ella esté...

"Él te ha liberado y sacado toda tu luz, ¿eh?", pensé, orgullosa de mi hijo.

-Aria: la salvaremos –tenía claro.

Y, después de escuchar alejarse unos pasos fuera de la prisión, perdí el conocimiento en sus brazos. Un buen lugar.

El Pecado del Alquimista 11 [+18] (Genshin Impact)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora