Estrellas || Lily Evans

26. Remus Lupin, el hombre lobo.

Camille había cumplido su palabra, cada vez que Lily salía de clases, ella estaba ahí, lista para acompañarla a la próxima.

—Te recuerdo que no es necesario que lo hagas —le decía Lily cada vez que Camille aparecía para acompañarla. No le molestaba que lo hiciera, pero sentía que pronto la francesa se cansaría de verla tanto tiempo—. No quiero que andes perdiendo el tiempo de esta forma.

—No es perder el tiempo, es invertirlo fructíferamente —Camille le respondía lo mismo cada vez—. Sea lo que sea que signifique eso, no recuerdo quien dijo eso, pero sonaba bien.

Después de que todos en el castillo parecían haber superado el tema de Nathaniel Selwyn, Lily comenzó a mencionar los «TIMOS» en cada conversación que tenían.

—¿Ya estudiaste? —preguntó, mirando a Camille con atención.

La francesa se había colado en su habitación, y estaba recostada en su cama, mirándola con las manos tras su cabeza.

—¿Para qué o qué? —preguntó Camille, sonriéndole levemente.

Lily estaba sentada a los pies de la cama, con la mirada fija en un libro que tenía entre sus manos.

—Para los TIMOS.

—Otra vez con eso —Camille se quejó—. La primera vez que lo mencionaste me emocioné, pensé que nos enseñarían a timar a las personas.

Lily alzó la mirada para poder mirarle con incredulidad.

—¿Y por qué te emocionaría eso?

—Sería una enseñanza útil para la vida diaria —respondió con naturalidad—. De todas formas, ¿qué era lo que significaban las siglas? ¿«Terribles, Idiotas, Molestas Señoras»?

Lily se rio.

—¿Y la «O»?

—En Molestas, «MO».

Camille sonrió ampliamente cuando la vio soltar una carcajada.

—Las siglas significan «Título Indispensable de Magia Ordinaria».

—¿Y la «S»?

—Es porque son en plural, TIMOS.

—Claro, eso tiene todo el sentido del mundo —Camille no lo pensaba de verdad, pero no lo diría en voz alta—. ¿Entonces por eso es que estás estudiando como loca?

—Básicamente —Asintió—. No falta mucho para los TIMOS, necesito estar totalmente preparada.

—Pero es casi finalizando el año escolar —Camille se quejó—. ¡Apenas estamos finalizando febrero!

—Sí, pero tengo mucho que estudiar —Lily la miró—. Creo que deberías hacer lo mismo.

—Prefiero pasar mi tiempo mirándote, si soy sincera —confesó—. La verdad, es más interesante mirarte a ti que ponerme a leer.

Lily usualmente se habría sonrojado ante ese comentario, pero simplemente negó con la cabeza mientras murmuraba que la educación era mucho más importante que mirar a alguien.

—¡Incluso Phoenix ha estado estudiando! —exclamó Lily cuando a su memoria llegó el recuerdo de verlo junto a Remus en la biblioteca, ambos con libros en sus manos. Camille simplemente resopló con diversión.

—¿De dónde sacas eso?

—Lo vi con Remus, con un libro de Transfiguración.

—Seguro tenía un cómic sobre las páginas —Camille sonrió—. Hace eso todo el tiempo.