La Bitácora De Un Embarazo Mágico

Capitulo # 38

—¡Corre Draco muero de hambre! — gritaba la castaña mientras corría por el pasillo hasta las escaleras.

Draco corría detrás lo más rápido que podía —¡Ten cuidado , por Merlín!

La castaña trastabillo y por poco se cae, más fue auxiliada por su amigo Neville que venía en sentido contrario.

—¡Cuidado Hermione! — susurró divertido sé que tienes hambre, pero debes cuidarlos, tu bebé y tú son importantes.
Y mirando hacia atrás replicó — y a tu novio lo vas a matar de un infarto si no te calmas .

Hermione golpeó el piso e hizo un tierno puchero … Es que nadie me entiende tengo hambre, estoy cansada y aún me faltan algunos pisos para llegar al comedor.

—¡Vamos a nuestra torre para que descanses tomando un relajado baño con esencias! — afirmó su novio — al salir tendrás la comida que desees, llamaré a Lenny para que la traiga ¿Qué dices?

—¡Bueno! — respondió Hermione aún molesta ¡Está bien, acepto!

Tomados de la mano bajaron hasta el tercer piso, en la entrada a su torre, Timothy el tímido los miraba sonrojado y bajito preguntó — contraseña

— Thesaurus — susurró Draco entrando primero para revisar la torre.

Guío a su novia al salón. Quédate aquí, amor iré a preparar tu baño. Si quieres llana a Lenny para que te traiga lo que desees.

—¡Lenny! ¡Lenny! — ven por favor.

El pequeño elfo apareció e hizo una reverencia — la amita Malfoy llamo a Lenny ¿Desea que le traiga algo para merendar?

Hermione instintivamente acaricio su vientre ¿Cómo estás, mi amor chiquito? ¿Quieres comer?

Scorpius abría sus ojitos mientras bostezaba y estiraba sus bracitos … mami dormí muy rico — murmuraba a través del vínculo, ahora tengo hambre …

—Yo también amor, pediré sopa caliente, recordé el sabor de las sopas de mi madre, tu abuelita Jane. Ya sé está noche comeremos comida muggle.

—¿Mugle?— ¿Qué significa eso, mami?

—Asi nos llamaban ciertos magos a los magos como yo nacidos de padres sin magia .

—¿Y yo también soy mugle mami?

Hermione reía tapándose la boca al notar el error de su hijo,
¡No mi amorcito, cuando nazcas te lo explicaré!

Scorpius no convencido por la respuesta de su madre se quedó callado y muy quieto. Situación que alarmó a Hermione que se empezó a sentir extraña.

—¿Bebe, mi cielo? ¿Estás molesto? — preguntó acariciándose el vientre algo nerviosa.

El bebé no respondió. Su madre pensó que se había dormido.

— ¡Está listo su baño, sra. Malfoy — recalcó Draco. De repente se dió cuenta que su novia estaba distraída ¿Estás bien? — preguntó

—¡Sí, claro! — subamos entonces. 

Hermione fue guiada por su rubio hacia la tina y juntos tomaron un relajante baño con escencia de vainilla.

Luego bajaron a la sala común, allí les esperaba Lenny con su merienda.

Lenny colocó el plato de sopa de pollo casera, pan, fruta y un vaso de leche frente a su ama, quien comió gustosa mientras susurraba nanas para su bebé.

Draco se sirvió la sopa, curioso por saborear comida muggle.

Todo estaba en calma y hubiera sido una noche tranquila, de no ser porque cierto castañito malcriado se portó mal.

A la mente de la castaña llegaron ideas extrañas haciéndola susurrar hechizos verbales sin querer…

— ¡Wiguardium Leviousa! — murmuró y Draco conenzo a subir poco a poco al techo de la torre.

— ¡Hermione, que haces!  ¡bájame! — ordenó el rubio entre asustado y sorprendido.

Los hechizos seguían saliendo de su boca sin querer … se giró a la mesa y dijo — reducto. La mesa era solo polvo.

La castaña se tapó la boca asustada, mirando con desesperación a todos lados buscando ayuda no entendía lo que le pasaba. Gruesas lágrimas surcaban sus bellos ojos por la frustración.

Draco aún suspendido en el aire convocó su patronus … busca a Theo Nott ordenó. El dragón serpenteo por el lugar para luego desaparecer.

Luego de unos minutos llegaron a trópicones dos Sly y Lunita cargando un gordo libro viejo  que parecía que en cualquier momento se haría polvo.