Ginny al salir de su casa junto a sus padres invoco su patronus, un hermoso corcel y se lo envío a Blaise...con un corto mensaje.
... <<Alguien lanzó fuego maldito a nuestra casa, convirtiéndola en cenizas, ahora no tenemos a dónde ir>>
En respuesta, Blaise pensó hacer lo mismo, pero se apareció envuelto en una bruma oscura para no ser visto e inspeccionar a breves rasgos el lugar.
Y alcanzó a ver a Helen, que con varita en mano disfrutaba de su maldad.
Sin ser visto se acercó a Arthur y dijo — ¡Confundus! — llevó a sus suegros y su pelirroja de fuego hacia su mansión.
Arthur junto con Molly y Ginny se aparecieron en el 12 de Grimmauld Place o eso pensaron.
Al salir de la chimenea, Molly se giró sorprendida al ver tanto lujo y excentricidades.
— ¡Arthur despierta no estamos en la casa de Harry!— susurró Molly — mientras zarandeaba a su marido para que reaccionara.
— ¡Es verdad querida! — respondió Arthur pestañeando aún confundido y mirando el entorno con desconfianza, pero ¿dónde estamos? ¿Ginny?
— ¿Ginny? ¿Ginny? — gritaba Arthur asustado.
— Aquí estoy papá — contestó la pelirroja saliendo de un armario — la casa es muy bonita.
— Sal de ahí — susurró su madre — no seas atrevida ni siquiera sabemos de quién es esta casa.
Un viejo elfo vestido de mayordomo se apareció en ese momento.
— ¿Desean los amos Weasley algo de tomar? — preguntó el elfo — hasta que baje mi amo.
— ¿Y quién es tu amo? ¿Y por qué nos han traído aqui? — preguntó Molly sería — parece la Mansión Malfoy.
— No estoy autorizado a decirle quién es el amo de la mansión — dijo el elfo.
— ¡Mamá, por favor! — pidió Ginny — no pelees con el elfo, él solo hace su trabajo.
— ¿Si desean desayunar los señores Weasley y ama Ginny? — preguntó el elfo — siganme por favor al comedor.
Molly miró a su corta familia y avanzó tras el elfo para que los guiará.
Una vez allí se abrieron mágicamente dos sillas para que tomarán asiento los patriarcas, pero a Ginny el elfo la invitó a que se sentará al lado derecho de la cabecera.
La mesa estaba preparada para 5 personas, con sus cubiertos y platos ordenados. Dos grandes tazónes en la mesa, uno de frutas y el otro de piernitas de pollo.
Arthur respiró el rico aroma del pollo y pensó — si así huelen estos manjares, su sabor será un gran manjar para mí.
Molly miraba el lugar con desconfianza, aunque su intuición de madre no podría fallarle está vez, — esta casa es de un sangre pura — pensó para si misma, pero de ¿Cuál de ellos?
Una vez aparecieron los demás alimentos, entraron al comedor Blaise y su madre Lorraine colgada de su brazo.
— Buenos días — saludó la matriarca arrogante — sean bienvenidos en mi casa.
Mi nombre es Lorraine Zabini Alejandro soy la dueña de esta casa y él es mi hijo Blaise Zabini.
La silla de la izquierda fue abierta de la misma manera, para que Lorraine se sentará.
Blaise tomó el lugar de la cabecera e hizo un asentamiento de cabeza para que sirvieran los alimentos, que fueron apareciendo en los platos de cada uno y vino en sus copas.
Tomó disimuladamente la mano de Ginny y le dio un tierno beso en el dorso, acción que no paso desapercibida por ambas madres.
Desayunaron en silencio y una vez que terminaron, Blaise se levantó y los invito a pasar al salón. Ofreció el brazo a su madre, pero esta hizo un movimiento con la mano y avanzó sola.
— Ofrecele el brazo a tu novia mejor — enfatizó Lorraine ¿o crees que no me di cuenta la manera en que se miraban en la mesa?
— ¡Mamá! — llamó Blaise tragando grueso — cuando notó la mirada inquisidora de Molly.
Todos juntos entraron al salón. Lorraine ofreció asiento a los adultos, mientras los jóvenes se quedaron atrás.
Lorraine tomó la palabra. Se que tendrán desconfianza de mi y de mi hijo. Ya que mi esposo Alessio Zabini, era seguidor fiel de Voldemort y murió por su locos ideales de la sangre, pero ni mi hijo ni yo éramos partidarios de eso.
Ahora que él ya no está, pensamos vivir tranquilos. Mi hijo y yo somos confidentes. Siempre supe de los sentimientos de mi hijo por su pequeña pelirroja.
Y en honor a ese amor que está naciendo entre nuestros hijos, Blaise me ha pedido que los reciba en una de mis propiedades, pero sé que no depende de él que ustedes acepten.
— ¿Qué opina usted, Sr. Weasley — preguntó Lorraine — ¿va a aceptar mi hospitalidad?
Arthur miró a Molly esperando una negativa que nunca llegó. Viendo que ambas mujeres estaban de acuerdo respondió — Si, señora Zabini, muchas gracias por su ayuda.
— ¡Peter! ¡Peter! — llamó Lorraine — apareciendo el viejo elfo mayordomo.
— ¿ama Lorraine llamó a Peter? — preguntó el viejo elfo — haciendo una venía.
— Prepara la Casa Morelia para la Familia Weasley — ordenó Lorraine y luego vienes a buscarlos.
— Así será ama — dijo el elfo y desapareció.
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La Bitácora De Un Embarazo Mágico
RomansaHermione y Draco se casan después de la Segunda Guerra Mágica, pero por la venganza de una mujer despechada, el rubio vivirá un eterno sufrimiento. Cabe recalcar que en esta historia, los protagonistas y coprotagonistas tienen 18 años, salvo Hermion...