Capitulo # 45

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Astoria caminaba muy tranquila por el bosque en busca de su madre.

Al llegar fue recibida por Goyle padre que la miraba fastidiado.

_No puedes salir del castillo como quien se va de paseo _ replicó el hombre _ debes tener cuidado por si alguien te sigue.

_No hay nadie, todos están enterrando al guardabosques que madre mató ayer.

_¡Sh…! _ no lo digas en voz alta, ni lo pienses tanto, no quiero ver aurores por aquí

_Tranquilo soy buena oclumente_ replicó arrogante.

_¡Digna hija de tu madre, pretenciosa y arrogante! _ exclamó el viejo fastidiado.

Astoria que no se quedaba callada contraatacó _ ¡Y usted un viejo envidioso e inútil igual que su hijo!

Goyle sacó su varita listo para atacar a la imprudente muchacha, más al grito de "Espeliarmus"_ hechizo lanzado por Mulciber, fue expulsado lejos de ella.

Una vez que se puso frente a la muchacha para defenderla se acercó a su compañero y le dijo _ que sea la última vez que atacas a mi … se retracto enseguida… a la muchacha, ¡me oíste!

Goyle molestó lo miro moviendo su cabeza de arriba a abajo, e hizo una mueca,  retirandose de allí.

Astoria escuchó claramente sus palabras, pero debía preguntarle bien a su madre.

Helen al escuchar el barullo jalo a su hija y se la llevó a su habitación.

_¿Qué haces aquí, Astoria, para que haz venido?_

La muchacha la miraba indignada, más no se dejó humillar. Vine a preguntarte sobre la maldición de las mujeres Greengrass, según leí todas nacen con ella.

Y ya descubrí porque yo no la heredé… mi padre no fue Edmundo, sino que mi padre es Mulciber, ¿cierto madre? ¿Cuando pensabas decírmelo?

_¡Basta! _ no seas estúpida respondió su madre ¡No tengo porque darte explicaciones de mis actos! Más bien deberías agradecer me que te salve de una muerte segura.

_¿Me vas a explicar la bendita maldición?_ o tendré que preguntarle varias cosas a "mi padre"

Helen la miraba con odio, aunque en el fondo estaba orgullosa de que sea igual a ella.

La primera mujer Greengrass nacida hace 100 años murió joven, por una maldición de sangre lanzada por los enemigos de la familia.

La afectada al terminar la adolescencia le aparecía una protuberancia en el cuello, debajo del brazo o en la ingle que le causaba fatiga, fiebre o pérdida de apetito, y en el peor de los casos le brotaban manchas negras en los brazos y las piernas.

Su muerte llegaba hasta 5 años después de manifestarse los síntomas.

_Pero eso más parece una enfermedad muggle, madre.

_No te equivoques, Astoria _ Edmundo ni ningún hombre Greengrass iría a pedir ayuda a un sucio muggle, su orgullo ante todo.

_¿Así sus hijas se mueran? _ preguntó

_ Tú sabes mejor que nadie que a ellos solo le importan sus hijos varones para perpetuar su apellido. Y las mujeres solo quedaban relegadas a los contratos de matrimonio.

_ Osea que Edmundo sabía que Daphne tendría la maldición e igual le concertó contrato con Theo, ¿Y si moría antes de concebir un hijo? ¿Quien cuidaría de ese niño? ¿Theo o yo?

_ ¡Theo por supuesto! _ exclamó Helen _ Ese niño no sería nuestro problema, pero ahora será pelirrojo y pobreton cómo su padre. No ves que la estúpida de tu hermana se banderea por el colegio con él. Ya los he visto varias veces y me provocan arcadas.

_Sin embargo, tú tendrás mejores oportunidades, cuando averigues dónde están escondidos la  ss y su bastardo para quitarlos de tu camino, así Draco y su fortuna serán solo para ti.

_ ¿Tú te encargará de desapacerlos, verdad madre?_ preguntó yo no me quiero ensuciar las manos.

_ Tranquila antes de irme de este mundo, te daré ese regalo, hija mía.

















La Bitácora De Un Embarazo Mágico Donde viven las historias. Descúbrelo ahora