Capítulo 22

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En los siguientes días, Xiao Yuan atendió un negocio. El negocio no era muy difícil; el viejo maestro Xu, de la familia de farmacéuticos del poblado de Tong'an, estaba muriendo de una grave enfermedad y quería ver a su difunta esposa, que falleció cuando él era joven. Xiao Yuan copió la apariencia de la esposa muerta del Maestro Xu y le susurró unas palabras. Después de eso, el Maestro Xu partió con una sonrisa en el rostro.

El hijo del Viejo Maestro Xu, el Joven Maestro Xu, amaba y respetaba a su padre, por lo que consideró a Xiao Yuan como su gran benefactor. Xiao Yuan le pidió un tael de plata como pago, pero él le dio cien veces más. Xiao Yuan declinó cortésmente:

—No me hace falta plata, pero llevo dos años buscando una medicina y no la he encontrado. Si el Maestro Xu puede ayudarme a encontrarla, entonces el Maestro Xu se convertirá en mi benefactor.

—¿Qué tipo de medicina está buscando el Maestro An? —preguntó el maestro Xu.

—Hua despiadado —dijo Xiaon Yuan.

El antídoto para el Gu que Luo Lan le había dado lo examinó un farmacéutico y ya tenía la receta; lo único que faltaba era este ingrediente, el hua despiadado.

La expresión del maestro Xu era complicada:

—El hua despiadado y belleza de la serpiente, nacidos en el Mar de Wuchuan, crecen en tierras desoladas y ambas son muy raras. Sólo los grandes clanes de cultivo del Reino Inmortal Superior pueden obtener uno o dos. La familia Xu tuvo la suerte de conseguir una hace muchos años, pero fue utilizada para curar la enfermedad de mi padre, así que me temo que será difícil encontrar otra...

Xiao Yuan ya sabía todo eso, así que sólo dijo:

—De cualquier forma, le pido al Maestro Xu que se ocupe de ello por mí. Si hay alguna noticia al respecto, por favor hágamelo saber de inmediato. El precio no es un problema.

El maestro Xu de repente pensó algo.

—Por cierto, oí que en la fiesta de contemplación de las flores en el Palacio Baihua, habrá hua despiadado y belleza de la serpiente para que los invitados disfruten.

—¿La fiesta de contemplación de las flores? —repitió Xiao Yuan pensativo.

El Maestro Xu se sonrió a sí mismo:

—Es una pena que la familia Xu sea sólo un clan del Reino Inmortal Inferior y no haya recibido una invitación para la fiesta. De lo contrario, haría todo lo posible para traer la medicina al Maestro An.

—¿Qué está diciendo el Maestro Xu? —consoló Xiao Yuan con una sonrisa—, ya me has ayudado mucho.

Xiao Yuan volvió a su apariencia original y regresó a la mansión. Cuando estaba entrando por la puerta, sintió que alguien tenía la mirada fija puesta en él. Cuando se dio vuelta, encontró a Gu Louyin, a quien no había visto desde hacía unos días. Gu Louyin estaba de pie bajo el sauce de la entrada de la mansión An, sosteniendo su espada en la mano, con un aspecto de orquídeas y jade, incomparable con el de cualquier persona en el mundo. Los dos se miraron y Xiao Yuan ya no pudo fingir no haberlo visto, así que se dirigió hacia él y preguntó.

—¿Cómo estás, maestro inmortal? ¿Estás de paso?

—No —Gu Louyin miró al hombre de aspecto sencillo que tenía delante y sintió que su corazón volvía a palpitar sin explicación—. Te estoy esperando.

—¿Esperándome? —Xiao Yuan dijo sorprendido—. ¿Hay algo más que el maestro inmortal quiera?

—Quiero que te conviertas en alguien —dijo Gu Louyin palabra por palabra.

El mundo entero es mi crematorio + Extras [Español]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora