El mundo entero es mi crematorio + Extras [Español]

Capítulo 58

Xiao Yuan abrió la boca sorprendido.

—Esto...

—¿Lo has visto claramente? —Luo Lan levantó la mano delante de Xiao Yuan—. ¿Soy el padre de Gu Louyin?

Xiao Yuan agarró la mano de Luo Lan, miró más de cerca la mancha de sangre y finalmente tuvo que admitir que se equivocó, así que sonrió y trató de enmendarlo:

—Tío, perdóname. Creo que Gu Hang no se preocupa en absoluto por su hijo. Como tratas tan bien a Gu Louyin y te preocupas tanto por él, tenía sentido que pensara eso.

Luo Lan resopló fríamente y señaló:

—¿Tienes que ser pariente de alguien para ser amable con él?

Xiao Yuan tuvo que estar de acuerdo:

—Eso es cierto. Gracias, Tío, por enseñarme otra lección.

La expresión de Luo Lan se alivió ligeramente:

—También pido que el Maestro Xiao no vuelva a mencionar este asunto en el futuro.

Xiao Yuan asintió como quien pica un ajo.

—No lo mencionaré, no lo mencionaré.

Cuando Xiao Yuan regresó a la casa, Fang Baichu lo saludó y le preguntó:

—Joven señor, ¿cuál es la situación?

—No pasó nada —Xiao Yuan negó con la cabeza.

Fang Baichu tenía una expresión de "lo sabía".

—El joven señor debe haber pensado demasiado. ¿Criaría el digno maestro de la secta de la espada número uno del mundo al hijo de otro y lo dejaría ser el joven maestro de la secta?

Xiao Yuan aún no se rindió. Miró la botella de porcelana en su mano y dijo:

—Sería genial si Gu Hang pudiera tocarla también.

Fang Baichu aspiró una bocanada de aire cuando escuchó esto y dijo con una sonrisa seca:

—El joven señor no habla en serio, ¿verdad?

—Déjame pensarlo —Xiao Yuan pellizcó el centro de sus cejas.

Xiao Yuan aún no había pensado el siguiente plan cuando Gu Louyin actuó primero. Temprano en la mañana, Xiao Yuan todavía dormía cuando despertó por un ruido afuera de la ventana. Se levantó de la cama y se puso la piel de zorro, se dirigió a la puerta y se apoyó en ella para observar el alboroto.

Gu Louyin estaba en el patio, como si fuera a salir. Luo Lan estaba frente a él, frunciendo el ceño; Fang Baichu se hizo a un lado con cara de vergüenza, mirando a Xiao Yuan y extendiendo las manos, inocente e indefenso.

—¿No recuerdas las palabras del médico? Si no te recuperas bien, ¡sólo te quedarán diez años de vida! —dijo Luo Lan enfadado.

—Lo recuerdo.

—¡Lo recuerdas pero sigues corriendo por ahí! —Luo Lan estaba furioso—. La pérdida de tu energía espiritual no ha sido restaurada, ¿a dónde más quieres ir?

—Tengo algunos asuntos.

Luo Lan se atragantó por un momento, intentando razonar con Gu Louyin:

—Maestro Gu, tú y yo somos extraños que nos conocimos por casualidad pero tenemos una amistad que va más allá de la edad. Tú nos diste el Hua despiadado, a cambio, si tienes algo que hacer, puedes decírnoslo directamente. Los tres estaremos encantados de ayudarte.

Después de que Luo Lan dijera tanto, la respuesta de Gu Louyin fueron sólo tres palabras:

—No es necesario.