Isabella Swan, Mi Luna

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Luca al fin había podido lograr que la fiebre pareciera menor, sin embargo, se resigno a entender que no era por obra tras escuchar como tocaban la puerta y justo para el atardecer, Charlie se encargara de abrir la puerta encontrandose con el Alfa entre sus brazos al estilo de rescate de princesa.

—No se como haremos, pero necesitamos que esten juntas y la cama de Bella es muy pequeña para ambas. —dice Yiara con algunas gotas de sudor en la frente.

Luca enseguida acató la idea, y fue a ordenar todo lo que podía la cama de Bella para poder colocarlas juntas. Hizo un pequeño arreglo, colocando el colchón en el suelo y las almohadas encima, para luego bajar rapidamente por las escaleras.

—Ya. Llevemoslas.—dijo el peligro con el cabello desgarbado tras mover todo rápido.—¿Que ha ocurrido?

Yiara sin pestañear se lleva a su alfa escaleras arriba sin decir mas información, y tras ella Luca con la pequeña Luna durmiendo al fin profundamente, como si percibiera que su Alfa estaba cerca. Y eso era lo que pasaba exactamente.

Luca pudo ver como con una delicadeza innata bajaba a la albina directo al colchón, sin decir nada al respecto por su "ordenada idea". Tras ello, este dejó a la Luna cerca de la albina, ocupando el espacio restante en la cama rectangular de una plaza.

La albina de manera protectora atrae a su luna cerca, y Bella se apega a ella, dejando al descubierto su cuello con la marca caliente. Por lo que ambos protectores amigos, ven perfectamente como la piel gelida de la albina se oculta a olfatear esa zona, solrando un suspiro gelido como un gruñido de satisfacción al encontrar lo que mas deseaba tener. Mientras que Bella automáticamente vuelve a tener un color normal de piel, sin perlas de sudor de por medio.

Aunque Luca abre la boca y se ve un humo del aliento, hacía bastante frío para ambos por lo que deciden retirarse, dando por finalizado su encargo de cuidado por ahora. Yiara suspira cansada recostandose en un abrazo a su pareja, mientras este la atrae en un abrazo liberador y cariñoso por parte de Luca, quien besa la cabeza de su mate con mimo.

—El Alfa no anda comiendo bien, debemos cuidarla mas o sino no podremos verla vivir en los proximos años recien estamos en 2006 vamos a llegar a 2007 y ya terminamos con un conflicto mas entre vampiros. —admite Yiara preocupada.

—Y que no se nos olvide, los nomadas están causandonos problemas. Y si no los detendremos, el Alfa deberá visitar Volterra. Antes de que Maxam haga algo al respecto. —comenta Luca compartiendo la preocupación.

—Se nota lo opuestos que somos. —suspira soltando una muda sonrisa al escuchar lo dicho.

—¿Porque lo dices, cariño?—pregunta indignado por esa sonrisa no escuchada.

—Porque yo me preocupo por el futuro y tú por el presente. —responde mas soltada de estrés. Le divertía notar cosas como estás.

Mas que nada, por el motivo de saber que eean igual de preocupados y responsables a su manera, en tiempo y justa necesidad.

—Es lo que debemos hacer, ver el presente para mirar el futuro, cariño. —bromea ligeramente el de cabellos negros y piel pálida.

—Ya, ya. Comprendo. —le sigue el juego a esa sonrisa, llegando ambos a la sala. Ambos cenarían esta vez con Charlie.

Porque ambas a la vuelta del amanecer, tendrían sus encuentros y deberán estar pada notificarle cosas al Alfa. Y que la luna empiece a trabajar en tomar responsabilidad por lo que debe hacer mientras el Alfa salga del país y manada, no era fácil ser el que comandaba el orden general de Forks y de la estación invernal en estos tiempos.