Isabella Swan, Mi Luna

〔 1O 〕

El joven de cabellos oscuros, piel pálida, poco después de sentir la preocupación de la luna por él, no pudo mas ante el ruido de la conmoción a su alrededor. Entendió que su estado había sido intervenido por los paramédicos y en la ambulancia, pero después no supo que ocurrió porque todo se hizo algo doloroso y complicado de seguir manteniéndose consciente.

Aunque poder sentir el peso del cansancio en su cuerpo, sentir la incomodidad de estar sanando por la curación rápida pero después sentir que el ahora aroma a muerto, ya conocido que provenía del doctor Cullen supo que eso había sido una intervención del vampiro mayor del clan, entendía que fue por la mala curación de lo que pudo haberse curado mal. Por lo que, solo se dedicó a disfrutar de la agradable sensación que sus piernas y pies sentían, debido a que estaba en contacto con sábanas delgadas, el aroma también era evidente del lugar donde estaba a farmacéuticos junto con los sonidos de más personas en el Gran lugar del Hospital.

No supo cuánto ni cómo era el tiempo de su inconsciencia tras todo, pero si pudo escuchar la voz de su querido amigo y compañero, el Beta Jonas, tratando de calmar a la luna. Quien se culpaba al parecer por lo sucedido, y la verdad que si tenía la culpa, todos sabían el imán de desastres y accidentes del cual era ella, ¡hasta la alfa reina lo tenía en cuenta! «Ah... Solo voy a disfrutar un momento mas de este agradable momento, y luego voy a regañar a esa mocosa.» pensó Luca Marchelo.

Pensar para sí sólo mientras no tomaba la forma de su lobo Lorax, aunque igual en su subconsciente era quien realmente le reprochaba la manera de pensar, debido a que mientras no tuviera un pensamiento directo de lo dicho ni siquiera estando cerca de su alfa, no sentiría que había faltado respeto a la luna de su alfa. Aunque... Estaba en lo correcto, y no era para nada un mal decir.

-Permiso.

Al escuchar la voz armoniosa del vampiro, su letal pero calmado enemigo natural. O que bueno, no está raza en cuestión era quien le tenía un odio mortal, el de ojos rojos era el problema no esté paliducho. El doctor Cullen se había hecho presente, tras suyo, la luna y el Sheriff.

-Muchacho, que alegría verlo despierto. Muchas gracias por cuidar de mi hija, le estaré agradecido para toda la vida. -dijo Charlie.

-Lo haría siempre que fuera necesario, Sheriff.

-Luca, realmente lo siento, de verdad, perdoname por atraer-...-empezó diciendo Bella tras lágrimas y arrodillada a un lado de la cama.

Al parecer se había ganado el cariño de la luna, Luca estaba agradecido por tener una mujer así para su alfa. Si se preocupaba por personas que estaba a su alrededor era porque era consciente de lo que valían pero al parecer hacía falta demostrarle lo que ella valía aún en el mundo el cual era parte. En eso, se prometió en ayudar a su alfa y luna en el momento que sea.

-Siempre atraerás algún desbarajuste en las precauciones, y por mas que seas culpable en parte, pequeña Bella, usted debe saber que también el ambiente de la nieve tiene gran parte de la culpa del accidente que mira, no pasó a mayores. -regañó sutilmente a la pequeña.

Quién tras una mirada asintió, empezando poco a poco a calmarse, al parecer escucharlo con bien, era el punto para sacar adelante la seguridad y tranquilidad, al menos por momento de la luna.

-Yo... T-tienes razón. Aunque, si para otra vez te expongo a mas peligro, prometo ponerme a entrenar para protegerte a ti, a mi familia y Leona. -añade Bella mientras se limpia las lágrimas, tras una mirada decidida.

La sonrisa en el joven de dieciocho años en cuerpo, pero en mente y mundo sobrenatural poseía realmente 119, orgulloso de cómo era la luna. Mientras que Lorax se encontraba detallando y bromeando en la mente de querer ser el primer expectador de ver caer a su amigo Maxam en el encanto de su Luna. Se veía muy interesante de ver.

Tras la emotiva charla de comprobar que el perjudicado estuviera con bien, ni pasaba desapercido para los dos únicos seres sobrenaturales en la habitación, tanto Luca como el Doctor Cullen habían escuchado la advertencia del beta Jonas hacia la familia del último. Logrando que para menguar al parecer la reciente tensión en el ambiente decidió salir y que para la fortuna de ambos pasaba ignorado su ausencia para los dos humanos en el lugar.

Luca Marchelo entre todo el caos, sabía que el cobrizo hijo del Doctor Cullen sería la inquietud más desafiante y rica del camino que sentiría su alfa, lo había visto con las ganas de intervenir en el caos del accidente de auto, agradecía que al menos la familia entorno al cobrizo tuviera instinto de autoconservacion de sus vidas inmortales.

Porque de ser lo contrario, sabía perfectamente que su alfa y Maxam no serían tan piadosos de no venir a verlo como amigo, y Rey enfurecido de tal situación. Realmente admiraba cómo su alfa decidía por encima de lo protegía su familia, su luna y todo, para poder mantener a raya su cordura con el equilibrio del mundo. Una gran responsabilidad siempre estuvo en sus hombros, pero confirmar que sólo Jonas pudo venir, era situación crítica.

«¿Cómo estaría su alfa, y mejor amiga?» pensó tras mandar a la pequeña Bella junto Charlie a la casa.

Tan solo esperaba que verla completa a su luna, calmara la inquietud que podría haber ocasionado este pequeño caos en un día de rutina tranquilo y corriente como ese día.

# ¿Creen que es justificable el que "Leona" no halla ido corriendo como todo lobo por su luna? ¿Qué piensan de Leongina? ¿Será capaz Isabella de llegar a siquiera cumplir los 18 como esta fijado para que la alfa de la nieve y forks puede revelar el mundo que por derecho y decisión le pertenece por ser la pareja de la Alfa Hembra?