La recepcionista

94 18 24
                                    

¿Qué carajos había pasado? Me estaba ayudando a vestir y de repente me besó, y como si no fuera suficiente, se fué sin siquiera dejarme responder y sin darme explicaciones.

Luego de que mis pensamientos se pusieran en orden, salí a la puerta a buscarla, pero al abrirla Vix estaba ahí, observandome de arriba a abajo y sonriendo un poquito.

- Vaya, estás hermosa, misteriosa... Me gusta, vamos al turno.

- P-pero... Lila estaba ahí, y...

- ¿Eh? Vamos, perdemos el tiempo, los clientes estan por llegar ahora.- Vix agarró mi brazo y comenzó a caminar escaleras abajo, arrastrándome hasta la planta baja y entrando conmigo al cuarto para recibir a la gente, que era mas bien una sala de estar.

Al entrar, ella me dió el enorme libro y lo abrió para mostrarme, y la primera página que abrió fué la de Lila, en la pagina izquierda, un pequeño dibujo de frente junto a información de ella, en la derecha, tres dibujos muy realistas de ella desnuda, posando y mostrandose, no dejándome olvidar lo que paso hace menos de diez minutos.

- El trabajo es muy simple, los clientes entran y dicen lo que desean, nosotros le damos opciones de las chicas que estan disponibles. A las que hacen trabajo de afuera, de cazadoras, se les pone una etiqueta en la página en forma de zorrito rojo, a las que estan con clientes aquí, les ponemos una etiqueta morada, las que estan con el día libre o indispuestas, etiqueta verde, y a las que estan disponibles no les ponemos etiqueta.- Vix explicó rapido y yo pase las hojas un poco.

- Ok, parece sencillo... ¿Quién realiza los cuadros? Son a color, y casi imitación de la realidad.

- Los hago yo con magia, luego te explico. Están por venir clientes, preparate y atenta.- En el momento que dijo eso, la puerta frontal de la habitación se iluminó en rosa y un hombre apareció acompañado de una de las chicas. El hombre se veía adinerado, era algo alto, cabello con rulos y tez ligeramente oscura, vestía ropa de la alta sociedad, y lo mas importante, venia con una bolsa de dinero bastante grande.

- Buenas tardes damas, se ven mas que hermosas hoy... Tenía una reservación, número 5.- El hombre dijo y sonrió un poco, Vix sacó otro libro, uno mas ligero, y con una pluma que levitaba junto a ella, tachó algo.

- Bien, Lucía y Mavis lo esperan, cruce el portal, pago por adelantado por supuesto.- Ella chasqueo los dedos y un portal se abrió en la pared junto a él. Él dejó la bolsa de dinero en las manos de Vix y él cruzó el portal, la chica que lo habia acompañado se fué por donde vino.

- Eso... Fue raro.- Me quedé algo confundida al ver como la transacción había durado menos de un minuto.

- ¿No escuchaste los nombres que dije? Márcalas como que están ocupadas.- Su tono fue algo severo pero asentí y empecé a buscarlas en el libro, para luego poner las etiquetas correspondientes.- Justamente él tenía reserva, esas las manejo yo... Ahi viene otro.

Una chica apareció, que se veía bastante tímida, pero era bonita, piel blanca y cabello oscuro corto. La chica que la acompañó aquí volvió por el portal y se fué, dejando a la timida muchacha sola frente a nosotras.

- ¿U-ustedes son con quien yo voy a...?-  Me sonrojé un poco, pues tenía sus ojos puestos en mi mas que en mi compañera. Miré a Vix un instante y ella me hizo seña de que me acercara a ella. Yo abrí el libro suponiendo que sería para enseñarle a las chicas.

- Bienvenida a la Madriguera de la Zorra, por lo que veo, es tu primera vez, tanto aqui como en cualquier burdel. La linda conejita te mostrará en el libro las chicas y chicos disponibles, te recomiendo que mires las primeras páginas, se adecuan perfectamente para clientes primerizos.

La Madriguera de la ZorraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora