Secretos del armario

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La ducha fue mas relajante de lo que esperaba, Annie se limitó a ayudarme a lavar las zonas que no alcanzaba de mi espalda y me ayudó con mi cabello. Me alegró que el baño solo se limitara a limpieza y a ella corrigiendo mis ejercicios de hoy, mas que nada el como respirar mejor, no habría podido con la presión de alguien mas coqueteando conmigo, mi cuerpo ya se sentía muy raro últimamente y seguro era por el exceso de pociones en el aire.

Fui a mi trabajo de recepcionista con Vix, quien estaba vestida al igual que yo con unos pequeños shorts azules con un cinturón de cuero negro y una hebilla de plata. Un top del mismo azul abotonado, con una medalla en el pecho izquierdo que eran parecidas las insignias que utilizaban los guardias de la ciudad, pero con la cabeza de un zorro en vez del escudo de Cor, ademas de unos borcegos de cuero, yo aparte usando mi mascara.

- ¿Cómo te sientes? Te esforzaste con Annie esta mañana, te vi corriendo hasta aquí.

- Eso fue porque me quemaba con el sol, la Matriarca me hizo una crema para ello, pero perdió el efecto en cuanto empecé a sudar.

- Esos es nuevo, jamás escuché de eso... Una crema que te protege del sol, interesante. De igual manera puedo verte mucho mejor que hace unos días, te estás recuperando bien.

- Justamente quería preguntarse si hay algo en el aire o la comida, me estoy recuperando mas rápido de lo que esperaba y también estoy sintiendo mas deseo del que esperaría sentir.- Miré al piso algo pensativa mientras que ella estaba dibujando nuevamente en su libro.

- Bueno, la comida de aquí es especial para darnos mas energía, pero solamente la del medio día, a la noche es normal. Y la cantidad de perfumes mágicos en el aire de seguro están alterando un poco tus hormonas, las chicas están acostumbradas seguro, pero para ti que vienes de estar en una celda oliendo mierda debe ser un cambio muy abrupto para tus sentidos.- Ella seguía dibujando y sonrió un poco mientras se acercó para acariciar mi cabeza suavemente.- Estarás bien, te vas a acostumbrar, solo trata de no cogerte a nadie por error.

- ¿Cómo coges "por error"?

- Uhm, borracha, drogada, o puedes usarlo de excusa si en la mañana ves que no te gustaba a quien te cogiste.- Contestó ella y reímos un poco antes de que empezaran a llegar los clientes, había sido una mañana tranquila mientras ambas trabajamos, hacíamos buen equipo y me hacía feliz poder ser útil.

- Oye Vix ¿Cómo eras de Zorra?

- ¿Era? Sigo cubriendo algunos turnos a la tarde, es a veces claro, pero es divertido de vez en cuando volver a la acción, cubro a Max y Laura en las habitaciones de cuero cuando tienen que cuidar de su hijo. ¿No te haz cruzado aún con el recepcionista de la tarde?

- No, aún no, tengo clases a la tarde con la Matriarca... ¿Donde está la maternidad? No he visto el edificio en todo lo que llevo aquí.

- Está casi en la entrada de la granja, la dirigen parteras del convento de los hijos de la luz voluntarias.

Todo llevaba a ese convento, cuando las cosas se calmaran en el reino respecto a mi búsqueda, iría a echar un vistazo, se que Vix no me contaría abiertamente y Ariadna menos.

- Entiendo... ¿Quieres... Ayudarme a practicar? Laura y Max van a entrenarme como Zorra de BDSM, y quisiera practicar con alguien que tenga experiencia y en quien confíe. Siento que puedo confiar en ti de verdad y...- Estaba muy avergonzada por preguntarlo, pero no tenía con quien practicar, y con Lila me iba a costar mas, tenía muchas preguntas que hacerle y esperaba que de verdad me respondiera. Vix se acercó a mí y me agarró de las caderas mientras se acercaba a mi oído para susurrar.

- ¿Quieres dominarme? Uy, eso será divertido de ver, acepto conejita, podemos practicar cuando quieras, pero tendrás que desarrollar actitud para que yo me deje dominar, me gusta "resistirme".

La Madriguera de la ZorraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora