Kaneki The Hero

Capítulo 63 ;El Pasado Oscuro del Devorador de Héroes

Capítulo 63: "El Pasado Oscuro del Devorador de Héroes"

Intrigado por las respuestas parciales que había obtenido, Kaneki Butosaki continuó su búsqueda de la verdad detrás de su padre, el temido "Devorador de Héroes". Después de horas de investigación y conversaciones con héroes veteranos, finalmente logró descubrir un capítulo oscuro en la historia de su progenitor.

El Devorador de Héroes, cuyo verdadero nombre resonaba con una fuerza casi mitológica, se llamaba Butozaki Hayate. Antes de que ganara notoriedad por sus enfrentamientos con héroes de renombre, Hayate había tenido un pasado oscuro y complicado como un "Cazador de Héroes".

En sus días de juventud, Hayate había perdido la fe en el sistema de héroes y villanos. Creía que la sociedad estaba plagada de corrupción y que muchos héroes no merecían el título que ostentaban. Decidió convertirse en un justiciero autoproclamado, un cazador que perseguía a héroes que, según él, abusaban de su poder.

Durante esa época, Hayate adoptó el alias "Butozaki" para ocultar su verdadera identidad mientras lidiaba con aquellos que consideraba una amenaza para la justicia. Su nombre resonaba en susurros entre los héroes, que temían la sombra de un cazador que no dudaba en desafiarlos.

A medida que Kaneki profundizaba en el pasado de su padre, también se encontró con relatos contradictorios sobre si Butozaki Hayate era un héroe caído o un villano despiadado. Algunos hablaban de sus hazañas valientes contra héroes corruptos, mientras que otros lo denunciaban como un criminal peligroso.

Esta revelación dejó a Kaneki con más preguntas que respuestas. ¿Su padre era realmente un justiciero que luchaba contra la corrupción, o había caído por completo en el lado oscuro? Con su mente llena de incertidumbre, Kaneki se propuso descubrir más sobre el legado complicado de Butozaki Hayate y entender cómo eso afectaba a su propia existencia. La sombra de su padre se alargaba sobre su camino, y la verdad seguía escurriéndose entre sus dedos como agua en arena.                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                       Capítulo Adicional  63: "Sombras del Pasado en la Luz del Presente"

Decidido a conocer más sobre las habilidades y estrategias de su padre, Butozaki Kaneki se sumergió en la tecnología holográfica de la U.A. Trabajó arduamente para configurar un holograma que replicara con precisión a Butozaki Hayate en su época de cazador de héroes. La figura holográfica, imbuida con los recuerdos y habilidades de Hayate, se convirtió en el oponente de Kaneki en su simulacro de combate.

En un rincón del campo de entrenamiento, Kaneki activó el holograma, y la imagen de su padre se materializó frente a él. La figura de Hayate irradiaba una presencia imponente y recordaba a Kaneki la distancia que aún lo separaba de su progenitor en términos de habilidades y experiencia.

El enfrentamiento comenzó, y Kaneki luchó con todas sus fuerzas contra la proyección holográfica de Hayate. Aunque el holograma replicaba los movimientos y técnicas característicos de su padre, Kaneki luchaba por mantenerse al ritmo de la velocidad y la astucia que demostraba Hayate en su juventud.

El combate fue intenso y desafiante, con Kaneki esquivando hábilmente las rápidas embestidas del holograma. A pesar de sus esfuerzos, la brecha en habilidad era palpable. Hayate, incluso en forma holográfica, demostraba la maestría y astucia que había adquirido como cazador de héroes.

A medida que el simulacro avanzaba, Kaneki comenzó a darse cuenta de la magnitud del legado de su padre. No solo estaba enfrentándose a un enemigo formidable, sino que también estaba desentrañando la complejidad de la historia de Butozaki Hayate. En cada movimiento del holograma, Kaneki veía sombras del pasado de su padre, sombras que arrojaban luz sobre la dualidad de su existencia.

Aunque el combate holográfico culminó con la victoria simulada de Hayate, Kaneki no se desanimó. En cambio, canalizó su determinación y respeto por la memoria de su padre para seguir mejorando y alcanzar nuevas alturas. La sombra del pasado se desvaneció lentamente en la luz del presente, y Kaneki se encontró listo para abrazar su propio destino, forjado por las complejidades de su legado butozaki.