La otra Toretto

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—¡NO! — pero Leon no podía distinguir quién gritaba, si Ashton o Kelly.

—Parece que el tío Músculos no vendrá a la próxima parrillada.

—Estamos a 5 kilómetros, ve por la carretera lateral. Te llevará a la pista.

—Cúbrete— Ashton la seguía sosteniendo.

—¿Con qué?

—Abriré el camino— sacó una pistola y le disparó a uno de los conductores, el cual cayó del auto. lanzó a Kelly hacia allá y luego brincó él.

—Bien, ¿ahora qué?

—Vamos por tu sobrino.

—¿Tuviste un arma todo este tiempo?

—No es momento, Toretto.

Dos helicópteros llegaron a la escena. Ashton aceleró para darle alcance a Dom y a Dante, tenían que recuperar al niño. Ahora tendría una vendetta enserio con Dante Reyes, el autor intelectual de la caída de Jakob. Dom fue capturado con dos ganchos, uno a cada costado. Kelly buscó otra arma en el lugar y comenzó a disparar abriéndole paso a Dom, quien había impactado a un helicóptero con otro. León aceleró, Kelly volvió a subir al cofre, brincó al de Leon y alcanzó a su sobrino, el niño brincó a los brazos de su tía mientras ella descargó el cargador contra Dante, Leon zigzagueó y la puntería de la rubia no fue la mejor.

—Hola, Brian, vas a tener que brincar otra vez.

—¡Ahora! — gritó Leon y Juliana aceleró abriendo la puerta, Brian fue lanzado por su tía a tiempo que Ashton se deshacía de los dos coches escoltas de Dante. El hijo de Hernán Reyes vio la traición de su mejor lugarteniente, mientras él se mantenía duro.

—¡Ahora! — Juliana lo jaló hacia sí y se negó a dejarlo en el copiloto, lo acomodó entre sus piernas, ella era diminuta, así que sólo hubo necesidad de mover el asiento.

—¡Vete ya! — exclamó Leon.

—¡Dom!

—¡Vuelve al auto! — gritó Ahston estirando la mano.

—¿Estás bien?

—Sí, Jul.

—Toma la colateral— dijo Aimes.

—Vuelve por donde viniste— ordenó Kelly por el comunicador. Juliana pisó el acelerador y dio vuelta al volante con brusquedad.

—Dom— llamó Leon.

—Dommy, querido, qué gusto volver a verte— escucharon a Dante en el comunicador.

—Hay que volver.

—No, Brian, tus tíos irán por él.

—¿Me golpeaste con un helicóptero?

—Te lo mereces— gritó Ashton.

—Contigo me arreglo luego.

—La zorra va primero— dijo Kelly.

—Que salvajes son, los entiendo, quieren impresionar a Brian— siguió Dante—. ¿De verdad pensaron que iba a ser tan fácil? Estás donde yo quería. Sí, ya viene. Tengo una sorpresa para ti.

—Llegó la caballería, estamos contigo, Dom.

—¡Roman! — gritaron Leon y Kelly.

—Salgan de ahí— dijo Juliana.

—Es una trampa— concretó Dom. Un misil salió disparado hacia el avión.

—¡Nos atacan! — vieron cómo Aimes disparaba a la turbina y llegaba a impactarse en las montañas detrás de él.

—¿Ves? Ese es el problema con las familias grandes— dijo el traidor—. No puedes protegerlos a todos.

—Dominic, ¿es tu nuevo amigo?

—A ese le doy yo— dijo Ashton cambiando el cargador.

—Así eres de predecible, ¿crees que todos terminarán de tu lado? El problema es que Aimes fue mío primero.

—¿Y tú? — le puso el cañón en la sien.

—Primero mataremos a Dante, después me iré... te doy mi palabra.

—¿Cómo sé que puedo fiarme de ella?

—Por Jakob— la mano de Kelly tembló, se notó titubeante—. Por su memoria que prometo dejarte en paz, y si necesitas ayuda, con gusto iré.

—No te fíes, Kelly— Dante le hablaba por primera vez a ella—. Traicionó a Jakob, ¿No fue así como se conocieron? Desobedeciendo a su amo, ahora lo volvió a hacer.

—Es lo divertido de tener un brat.

Dante volvió a recordarle a Dom todo lo que le quitaba: su dinero, su libertad, ahora su familia. Su promesa era morir sabiendo que le volvería a arrebatar a su hijo. Dante maniobró su panel de control y puso en automático a los dos trailers. León dijo que no escuchaba a Dom, no tenía respuesta y Dante tampoco tenía intención de informar su victoria. Los coches frenaron cuando escucharon el enorme impacto de ambos monstruos de motor. Dom puso el acelerador y encendió el neopreno. Cayó en el agua y se escuchaban por el radio las carcajadas de Dante.

—¡Dom!