Deckard recibió una llamada sobre una misión en Roma, besó profundamente a su esposa antes de partir. Han ya se había ido, debía asegurarse que su hija siguiera oculta, seguro también iría a la misión. Kelly esperó un par de semanas a que Leon mejorara para aguantar el viaje. Juliana peinó a su amiga y le puso rayos platinos, se escondían a la perfección con su cabellera rubia mientras la esposa de Leon volvió a ser pelirroja platinada. El hombre a cargo no dijo nada, besó las manos de su esposa para darle fortaleza y esta derramó un par de lágrimas silenciosas, pensaba en su hijo y en que anhelaba verlo de nuevo.
—Vamos a estar bien— dijo Kelly.
Todos subieron al auto y él condujo hasta el hangar. Fue un viaje silencioso, quizá cada uno peleaba con sus propios demonios. Kelly temía despedirse de su esposo, le preocupaban sus hijos, estaban en un lugar seguro, sólo lo conocían ella y Elle, al igual que su esposo, no quiso decirle a Han ni Juliana o Leon dónde estaban o serían blancos fáciles. Juliana se sirvió una bebida y sólo la pasaba de una mano a otra. León quizá trabajaba en una estrategia a parte de ellos.
—Yo conduzco— Leon les abrió la puerta a ambas, besó la frente de su esposa y la mano de su primer amor.
—Perdió mucha sangre.
—Dom, ¿qué pasó aquí?
—Visita no grata— informó Letty.
—¿Cómo dejaste que esto pasara? — jaló al Pequeño Don Nadie del cuello, con una sola mano lo dobló.
—No lo maltrates— se acercó Juliana.
—Es la criminal más buscada y vino a tocar a mi puerta, este lugar era seguro y ahora la vida de mi sobrino está en peligro, ¡responde!
—Le perdimos la pista.
—Pues ella nos encontró...
—Dom, esto no puede ser una coincidencia— Leon logró que lo soltara de un tirón—, nos atacaron y encontraron a Cipher.
—Ya llamé a Mía y Brian, están bien— dijo Letty—, traté de contactar a Roman, Tej, Ramsey y Han, pero nada.
—Llamaré a Deckard, fue a buscarlos.
—¿A dónde?
—Roma, a la misión de la Agencia— dijo Juliana.
—No tenemos ninguna misión en Roma.
—Juliana, llama a Owen, nos vamos a Roma— espetó Kelly frustrada.
—Volveré, yo jamás rompo una promesa— Toretto abrazó a su hijo.
—Sé fuerte, pronto verás a tus primos— Kelly se acercó a jugar con su cabello, pero el niño se colgó de ella. Ya estaba tan grande, seguro Jack y Gisele eran aún más grandes, qué rápido pasa el tiempo.
—¿Estás bien? — se acercó Leon.
—Vamos a salvar a mi esposo.
—¿Significa que iré con ustedes?
—¿No estabas deseosa de entrar a la aventura? — sonrió con picardía y la pelirroja se colgó de su cuello, la rubia le acarició la espalda y no pudieron evitar llorar.
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La otra Toretto
Fanfiction*Basada en la saga Rápidos y Furiosos* El señor Toretto murió en un accidente de carreras, Jakob huyó y Dom fue enviado preso, así que Kelly se vuelve la cabeza de familia. Ahora que están reunidos todos los Toretto, compiten en carreras callejeras...