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La llamada de Dom coincidió con la explosión creada por la bomba. León jaló a las chicas para abrazarlas y ponerlas debajo de sí tratando de protegerlas. Ashton, como su buena suerte siempre hacía, fue jalado por la enorme oleada que se creó. Dom los llamaba luego de reponerse, Leon las revisó a ambas en busca de alguna herida y ambas asintieron que todo iba en orden. Los tres subieron al auto y pisaron el acelerador. Los noticieros hablaban de todos, los pintaban como lo peor de lo peor. No eran tanto de lo que decían, pero calaba cómo caía la realidad.

—Nunca había caído Roma.

—Pues lo logramos.

—Y no es gratificante— Juliana seguía en brazos de su esposo mientras la rubia maniobraba entre lo que quedaba de la ciudad.

—¡Dom!

—Kelly.

—No, déjame revisar.

—Estoy bien— la empujó, así que ella exhaló con pesadez y fue por el hielo.

—Haz lo que quieras— dado lo ocurrido con Jakob que ya no lo seguía ciegamente.

—Si Roma cae, el mundo también.

—No son vacaciones en Roma y tú no eres Gregory.

—Con mi familia...

—Tu equipo está oculto hasta que demos con él— negó con la cabeza—. Tienen a Letty— eso atrajo la atención de todos.

—¿Quiénes son?

—La Agencia, y tú encabezas la lista de los más buscados en el mundo. Quien hizo esto, quería que cortaras lazos con La Agencia y aislarte de tu familia; van a rastrear cualquier intento de contacto contigo.

—Necesito que le des un mensaje a Don Nadie.

—Para eso necesitas un médium, hizo su acto de desaparición.

—Sólo hazlo y veremos si le llega— dijo Dom—. Dile que quiero tomar esa cerveza belga y él sabrá a dónde ir.

—Es lo último que haré— puso su mano en la mejilla de su primo—. El mundo se incendia y tú sigues corriendo al edificio en llamas. Salvas vidas, pero el edificio se colapsará igual.

—Sólo me importa proteger a las personas que amo.

—¿Sabes por qué los gladiadores no tenían familia? Porque sabían que cualquier día podría ser el último. Estás tomando un camino solitario, cariño, no puedes llevar a nadie contigo.

—¿Y a mí no me va a abrazar?

—¿Y mis nietos? — a todos les dio un abrazo rápido, pero sostenía a su nuera por ambas mejillas. Estaba muy preocupada.

—A salvo, enserio, los mandamos a un refugio con La Abuela, con la hija de Han.

—La familia de Hattie va en camino.

—Esas son buenas noticias.

—Vamos a estar bien— Juliana la abrazó.

—Debemos cortar comunicación, pero, si algo le pasa a mis nietos...

—Será la primera en saberlo— dijo Kelly.

***

Los Ángeles

Mía se quedó con su sobrino, el ya no tan pequeño Brian, mientras su esposo cuidaba de sus hijos. Estaban en la casa de los Toretto, Brian era muy bueno con los videojuegos, no había mucho que pudieran hacer dado que no podían andar en la calle y menos recibir visitas. Eso no evitó que una bomba de humo irrumpiera en la sala. Mía le gritó que corriera, el niño sabía la magnitud de los problemas, fue entrenado casi desde que usaba pañales para correr a ocultarse, lo primordial era su supervivencia. Los Agentes de la Agencia entraron.

La otra TorettoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora