—¿Y cuándo piensan casarse, viejo? —preguntó Mohammed quién había venido al lado de Roxana.
—Blake dice que primero quiere tener al bebé. Después de eso nos casaremos —respondí.
—¿Y ya saben qué es? —preguntó Roxana emocionada.
—Qué va, Roxy, con la maldita recuperación en el hospital no he tenido tiempo de acompañar a Blake al ultrasonido —respondí.
—A propósito de eso, cielo, aquí está tu vaso de limonada... —dijo Blake interrumpiendo.
—Gracias, amor... —Di un trago y miré el líquido con detenimiento—. Ahm... ¿por qué es rosa? —pregunté.
—Es una limonada rosa. —Se encogió de hombros con una sonrisa.
—Ya, pero... ¿por qué? —Fruncí el entrecejo.
—¡Oh, por Dios! ¿¡Es en serio!? —exclamó Milly.
Blake sonrió de oreja a oreja y asintió con la cabeza.
—¿Qué? ¿Por qué te emociona tanto eso? —pregunté confundido.
—¡Viejo, despierta! —dijo Mohammed, mientras Roxana se cubría los labios.
—¿Qué? —pregunté confundido.
Volví a mirar el vaso y recordé el tema en el que Blake había intervenido.
—Ay, carajo... ¿es lo que estoy pensando? —pregunté con los ojos cristalinos, volviendo mi mirada hacia Blake.
—¡Vamos a tener una niña, cielo! —dijo entre lágrimas de felicidad.
—¡Santa Mierda! —Dejé el vaso en la mesa, me levanté de un salto y levanté a Blake entre mis brazos, girando un par de veces—. ¡Una niña! —Me puse de rodillas ante ella y sostuve su vientre con ambas manos—. Dios, me has hecho tan feliz... —dije mirándola a los ojos, para después dejar un beso en su hinchado abdomen—. Ansío tanto poder conocerla...
—Y creo que ambos sabemos qué nombre llevará, ¿cierto?—aseguró Blake—. Courtney.
Sonreí entre lágrimas de alegría y respondí a aquello con un tierno beso.
—¿Ya no voy a ser la princesa de tío Matt? —preguntó Amelia en los brazos de Amy.
—Tú no dejarás de ser mi princesa por ninguna razón, cariño —dije tomándola en brazos—. Sólo que ya no serás la única. ¿Te parece compartir tu lugar con ella?
—Sí, tío, Matt... —Sonrió contagiada por mi felicidad y rodeó mi cuello con sus pequeños brazos.
—¡Esa es mi princesa! —exclamé.
~
*Tres meses después*
—Entonces, Matt... Después de contarme que estás extremadamente feliz, porque tienes una preciosa y sana hija, que vive a tu lado y al lado del amor de tu vida en tu nueva casa. Que tienes excelentes amigos y que esa banda tuya está dando frutos... ¿Qué es lo que quieres decir para cerrar esta sesión? —preguntó Vera.
—No lo sé... que estoy muy agradecido por eso. Por las cosas que tengo ahora.
—¿Y por qué las tienes?
—Porque Courtney me dio esta oportunidad, por ella estoy aquí ahora... Y gracias a tu guía, por supuesto. —Me encogí de hombros.
—Ve más allá... —dijo negando con la cabeza.
—Agh... a veces me pones de los nervios...
—No es la primera vez que lo dices, anda... eres muy listo, ve más allá.
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Set Me Free
FanfictionLa calma no llegó después de la tormenta más violenta. Cuando la peor pesadilla de Matt se hizo realidad, supo que su más merecida condena sería vivir para siempre dentro de ella. Ahogándose en remordimientos, y refugiándose en recuerdos. Deseando...