Rebeca
Toque la puerta a la espera de una respuesta, pero nada.
- Talvez no estaba en su oficina – murmure para mí mientras intentaba de nuevo. Y repasaba las posibles causas por las que mi jefe podría llamarme a su oficina.
1. Nuestra última adquisición, la cuenta de GardenSun, pero esta está perfectamente bien. A menos que quiera hacer alguna acotación que no haya dado en la junta de ayer.
2. Alguna de nuestras otras cuentas, pero salvo los informes que debía entregar hoy no había nada mas de que hablar y hablando de informes, los había dejado sobre mi escritorio, si seré mensa. Rodee los ojos para mí misma.
3. El plan de contingencia que aplicamos para las festividades próximas de Navidad y Año nuevo. Puesto que la empresa tiene como pilar la familia, desde hace años que dan 2 semanas de vacaciones a los empleados. Este año estas empiezan el 21 de diciembre de 2015 y volvemos el 4 de enero de 2016. Pero eso lo habíamos hablado en la última reunión junto con la directiva y todo estaba listo. Tener dos semanas de vacaciones significa adelantar trabajo y para mí son horas extras de informes, análisis de la bolsa y de estipular estrategias aplicables a cada posible situación.
4. Que este molesto con su última secretaria o que esta ya le hubiese dado su carta de renuncia, algo que lamentablemente para mí es muy frecuente. Pero Amanda ya me habría comentado algo
5. Que me despida, aunque el jefe supremo me dio su aprobación. No creo que sea eso, pero...
– Adelante – salí de mi divagación mental al escuchar una voz grave y masculina se hizo escuchar atreves de las gruesas puertas. Todo esto era muy extraño y me parecía algo incómodo, no es la primera vez que hablo con mi jefe en su oficina, pero si la primera vez que él me solicitaba acudir a su oficina, incluso había olvidado las carpetas que estaba preparando y que debía mostrarle.
- ¿Me llamo señor Redstone? – pregunte algo tímida, él estaba de pie mirando por la ventana, al momento en que me escucho volteo para verme directo a los ojos.
- Si señorita Rodríguez, tome asiento por favor – me acomode en el sillón negro frente al escritorio de mi jefe y espere a que este comenzara, pero en lugar de sentarse en su escritorio y empezar con lo que fuese que tenía por decir, se dirigió hacia una pequeña barra en la esquina de la oficina – ¿Un trago? – ofreció
- No, gracias – no bebo, de hecho, jamás lo he hecho, tengo 25 años y nunca he probado un trago, talvez me vea como un bicho raro pero mi época universitaria la pase tan concentrada en mis estudios, trabajo y en Tomi, que nunca fui a fiestas y por ende no tuve contacto con el alcohol. Cuando termine mis estudios me concentre en mi trabajo, gaste todo mi tiempo libre en horas extras y las visitas que me era permitida, que yo finalmente...
- Rodríguez – alcé la vista y pude notar el ceño fruncido de mi jefe, me había estado hablando y no tengo idea de que.
- Lo siento – me disculpe rápidamente, lo escuche inhalar y exhalar, algo similar a un suspiro.
-Iré al grano – hizo una pausa y miles de cosas pasaron por mi cabeza quizás hubo algún problema con alguna cartera de inversiones, algún accidente con algún empleado, su secretaria ha vuelto a renunciar, talvez su padre sufrió una recaída, dejara la empresa, me despedirá - Cásate conmigo.- ahí estaba señoras y señores no me despedirá ni tampoco le ha pasado nada grave a su padre, suspire de alivio con una mano en mi corazón el solo quiere casarse, está bien incluso lo ayudaría a organizar la boda si me lo pidiera y hasta la llevaría un lindo regalo a su prometida.
ESTÁS LEYENDO
Cásate Conmigo
RomanceTodo lo que quiere Eduardo es algo de paz, a pesar de la prensa, los socios de su empresa y su familia. Todo lo que quiere Rebeca es la custodia de su hijo, a pesar de la justicia que la califica como no apta. Los problemas de Eduardo se solucionar...